Abandonen toda esperanza

Amigos funcionarios, servidores públicos que trabajan en las Fuerzas de Seguridad del Estado, Fuerzas Armadas, Agencia Tributaria, Dirección Insular de la AGE, Instituto Social de la Marina, Seguridad Social, Clases Pasivas, DGT, etc. Todos aquellos trabajadores públicos dependientes del Estado, pierdan toda esperanza de que el actual Gobierno vaya a mejorar, ni siquiera ridículamente, la ya paupérrima indemnización de residencia que ustedes perciben por el hecho de estar destinados en las Islas Pitiusas. Tanto el delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez Badal, como ahora también la directora insular de Ibiza y Formentera, Raquel Guasch, mencionan que seguirán trabajando en aumentar el plus de insularidad como hasta ahora. Dado que hasta ahora, sus antecesores no han conseguido absolutamente nada, que es como ir a peor a cada día que pasa, están dejando entrever que las cosas seguirán exactamente igual. Ellos seguirán trabajando pero en Madrid nadie les hará ni puñetero caso. Y dado que estamos en febrero y no hay presupuestos generales del Estado para 2024 y nadie sabe si los habrá en algún momento, dada la inestabilidad política del bloque que sustenta al Gobierno de PSOE y Sumar, donde cada uno aprieta por su lado y plantea las exigencias que le parece conveniente, sabedor que su voto es imprescindible para que haya presupuestos, todo se hace mucho más complicado. Al final, resulta que conseguir 18 millones para impedir que los servicios públicos estatales sigan vaciándose de personal, es misión imposible. Pero las señales de alarma se han disparado cuando Guasch y se jefe de Mallorca, insisten en que no sólo hay que centrarse en el plus de insularidad, sino que hay otras formas de hacer atractivo el destino en las Pitiusas para fidelizar a los trabajadores. Y no importa que sea dinero. Será con botijos.