En el conflicto de la sanidad pública pitiusa alguien sufre paranoia o miente como un bellaco. También podrían ser ambas cosas en el clásico divorcio de la realidad al que llegan los que alcanzan la púrpura del poder. Las declaraciones de los políticos encargados de la cosa chocan frontalmente con las opiniones de pacientes, médicos y personal de enfermería. Del afirmar que hay una muy buena situación sanitaria o que Ibiza y Formentera son un destino de gran atractivo para los médicos, en palabras de los responsables socialistas del Govern, pasamos a la manifestación donde los que conocen de primera mano el cotarro dicen todo lo contrario.
Delirios en la sanidad
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3 comentarios
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GustosoRacisme lingüístic es teu, amb una declaració explícita de supremacisme castellà. "Viva el ibicenco" però sempre que no faci nosa a sa llengua vertadera, "el español". Quina barra!
Yo cuando voy a un hospital lo que quiero es que me atienda un buen médico y me traten como a un ser humano. El racismo lingüístico que nos están induciendo los repugnantes políticos es solo para confrontar a la sociedad y ellos seguír viviendo a costa de nuestra miseria. Que en su casa cada uno hablé como quiera, pero en los sitios públicos que se hable lo que todo español sabe, el castellano. Viva la el ibicenco y el español.
S'eivissenc existeix i ès un dialecte o varietat de sa llengua catalana com qualsevol altre; i com que ès sa llengua pròpia i oficial d'Eivissa ès un requisit per fer feina a s'Administració Pública, com també ho ès sa llengua castellana. Es nacionalistes espanyols sempre juguen a embullar i a confrontar, però de cada vegada hi ha més població alfabetitzada en sa llengua pròpia que no s'empassolarà es seus embulls i ses seves mentides.