Tengo la impresión de que será muy difícil evitar que se produzcan robos en viviendas aisladas y ubicadas en el campo, y debe ser que en nuestra isla se han formado bandas especializadas en asaltos, en algunos casos utilizando la violencia, la fuerza bruta. Pueden ser grupos foráneos y posiblemente alguno aborigen, y se aprovechan de la escasa vigilancia policial y la circunstancia de que el Código Penal español es muy suave y, aunque se produzcan detenciones (pocas), los autores de los robos salen en libertad en muy poco tiempo. Por añadidura, los afectados por los asaltos no suelen recuperar lo que les han robado. Algo debe hacerse para evitar que los delincuentes sigan campando a sus anchas y casi con impunidad, y creo que hay que reforzar los sistemas de alarma en las viviendas, conseguir que la plantilla de la Guardia Civil aumente considerablemente y, sobretodo, se ha de modificar el anticuado Código Penal. A ver si los políticos que saldrán elegidos mañana espabilan y se mejora la situación de agobio y temor que sufren muchas familias ibicencas.
OPINIÓN | Nito Verdera
Delincuencia, Sant Antoni y actos culturales
Eivissa19/12/15 0:00
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