El Gobierno de Sánchez forzó este sábado un sorprendente cambio en la cúpula de Telefónica al destituir a José María Alvarez-Pallete como presidente de la empresa semipública por Marc Murtra, que hasta ahora presidía Indra. Pellete, cuyo mandato expiraba este año, presentó su dimisión después de que se lo pidiera el Consejo de Administración reunido con carácter de urgencia una vez que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que tiene el 10 por ciento de la entidad, propusiera este relevo.

Indemnización millonaria

El presidente saliente de Telefónica tiene derecho a percibir una indemnización millonaria de hasta cuatro anualidades, incluyendo la retribución fija y variable, que en su caso podría sumar más de 23 millones de euros. Ante este repentino cambio, el PP acusa a Sánchez de buscar la colonización de las empresas privadas con participación del Gobierno central después de haber colocado a sus peones más fieles en las sociedades públicas. Desde Vox, Santiago Abascal también opina que se está produciendo «el asalto de las empresas estratégicas españolas».

Muchas prisas

Es realmente sorprendente este cambio repentino en la presidencia de Telefónica, consumado en pleno sábado y cuando Pallete podría haber permanecido algunos meses más en el cargo. Este relevo ha producido una gran conmoción empresarial y también la sorpresa del propio Pallete, que supo que sería destituido unos minutos después de que Moncloa lo hiciese oficial. Desde Moncloa han admitido que se trata de una decisión personal del propio Sánchez, lo que pone de manifiesto sus intenciones de influir más allá de las empresas públicas y de controlar sociedades estratégicas del mundo de las telecomunicaciones. Algunos expertos vinculan esta destitución con toda la información que puede disponer Telefónica sobre la investigación contra la esposa de Sánchez, y concretamente en relación al software utilizado por Begoña Gómez. Este episodio vuelve a ratificar los métodos que es capaz de utilizar Sánchez para tutelar todos los instrumentos que dependen de él para seguir en el poder.