El servicio de Coordinación de Vivienda Sanitaria ha facilitado en su primer año de vida un hogar a un centenar de profesionales sanitarios, según publicó este periódico en exclusiva en su edición dominical. Este departamento se puso en marcha en 2023 y ha permitido poner en contacto a propietarios y a profesionales sanitarios necesitados de vivienda. La coordinadora de este servicio, Inma Soler, valora positivamente la respuesta de propietarios para sacar sus viviendas al mercado de alquiler.

Seguridad.

La falta de vivienda era uno de los principales problemas que padecían los trabajadores de la sanidad ibicenca. Los profesionales sanitarios, conocedores de la situación en la isla, rechazaban trasladarse a Can Misses porque sabían que gran parte del sueldo se destinaría a pagar el alquiler. No les compensaba económicamente venir a Ibiza y, además, sabían de la dificultad de encontrar un simple apartamento o incluso una habitación. Sin embargo, este servicio creado en Can Misses ha confirmado que existe buena disposición de los propietarios a alquilar sus propiedades si tienen la garantía del servicio de Coordinación de Vivienda Sanitario, que ejerce de intermediario.

Confianza.

El éxito del servicio creado en Can Misses confirma algo que ya se ha apuntado en distintas ocasiones. Mientras el propietario de viviendas no tenga garantías de poder cobrar todos los meses un alquiler difícilmente sacarán sus propiedades al mercado. Se ha demostrado también con el programa del Govern ‘Lloguer segur’, que está despegando con muchas expectativas de éxito. El problema es que la izquierda ha creído históricamente que puede promover el alquiler de viviendas yendo en contra de los propietarios. Es cierto que puede haber dueños de pisos que buscan la especulación, pero también existen inquilinos que no pagan regularmente la renta y, además, provocan daños en los inmuebles. La ley tampoco favorece a los propietarios en los desahucios. Es falso asegurar que dichos desahucios se ejecutan en pocos meses. Si además existe un clima de permisividad respecto a los okupas, sin que el Gobierno haya tomado medidas contundentes, la postura de los propietarios que no quieren alquilar es comprensible. Se ha demostrado que para dar un giro al mercado de alquiler solo haya un camino: dar garantías a los propietarios de los pisos.