La progresiva aplicación de la reforma educativa de LOMLOE afecta las escoletas al definirlas como centros de Educación Infantil. Ello implica que las administraciones públicas –y en Balears corresponde en primer lugar al Govern a través de la Conselleria d’Educació– han de garantizar unas condiciones óptimas. De ahí que se exijan unas aulas dimensionadas para asegurar espacios adecuados que eviten aglomeraciones y la separación por edades. Uno de los efectos de esta reforma consiste en que las nuevas escoletas que se construyan a partir de ahora en Baleares dejarán de estar gestionadas por los ayuntamientos y pasarán a manos del Govern, que hoy solo tiene cuatro a su cargo: Verge de la Salut en Palma, Magdalena Humbert en Maó, Francesc de B. Moll en Ciutadella y Can Nebot en Ibiza. La medida ha de mejorar las condiciones laborales de los profesionales, que también deberán acreditar su preparación.
La creación de nuevas plazas de escoletas: objetivo prioritario
Ibiza 28/08/24 0:30
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