La necesidad de renovar las caras en el PP

Regeneración. Tras los pésimos resultados del PP en las pasadas autonómicas y municipales los dirigentes populares deberían hacer una profunda reflexión. Hace falta cambiar el mensaje porque Ciudadanos se ha convertido en una amenaza más que real, pero además es conveniente cambiar las caras, poner gente nueva que ilusione al electorado. No parece que ese papel lo cumpla Enrique Fajarnés, cuyo papel en el Congreso de los Diputados ha sido más que discreto. Poco se sabe de su gestión aunque él se dé un aprobado. A diferencia de Pepe Sala, Fajarnés ni siquiera se plantó ante su grupo en el tema de las prospecciones.

Marí Bosó, la apuesta. La necesidad de hacer cambios pone a Marí Bosó en el disparadero. Hace meses que ya se sabía que el actual presidente del PP ibicenco tenía interés en dar el salto a la política nacional pero ahora tiene una postura mucho más compleja. Sería algo poco elegante que él mismo se presentase para ir en la candidatura, pero otra cosa es que los propios militantes de base, que es lo que ocurre, le propongan a Marí Bosó que dé el paso y sea la persona elegida para formar parte de la candidatura para el Congreso. Para eso, Enrique Fajarnés debería asumir que su etapa ya ha concluido y renunciar a seguir por quinta legislatura seguida en la política nacional. La respuesta, el 4 noviembre.