Jardines, fuentes y estatuas

Es penoso observar que los pocos jardines existentes están descuidados y muchas veces sembrados de plantas inadecuadas en su ubicación. Puede que digan que es para ahorrar agua, pero es que hay otras muchas plantas bonitas que necesitan poca. En más de una ocasión he visto que acabando de llover bastante regaban (sería porque ese día tocaba) mientras que otras veces las plantas pasan sed.

Citaré algunos ejemplos. Los jardincitos que hay en las esquinas de algunas calles,    sólo sirven para que los perros puedan aliviarse, en lugar de llevarlos al sitio destinado para ellos. Por cierto ¿cuándo van a quitar esas enormes piedras y sustituirlas por algún asiento para inválidos y ancianos.

En la fuente que hay en la Avenida Isidoro Macabich, suele estar bastante abandonada y con unas plantas descuidadas y totalmente inadecuadas.

En el parque de La Paz, en el monumento instalado con una fuente, cuando se construyó hicieron unas jardineras bajitas, que caían en cascada. Al poco tiempo en su lugar instalaron unas enormes piedras y sembraron captus. Eso podría quedar muy bien en una rotonda u otro lugar, pero allí es una bofetada a la armonía y el buen gusto.

En el jardín que hay en la Avda. España, lindando con la Cruz Roja, está ubicada una estatua de una mujer vestida con el traje típico ibicenco, pero a su alrededor en lugar de haber plantas bajas y que realzaran su belleza, las que están son totalmente lo contrario.

Con frecuencia se podan árboles y arbustos a destiempo (eso no quiere decir que si hay unas ramas que molestan no se puedan cortar), pero no una poda generalizada como he visto este mismo verano. Los entendidos dicen que si quieres matar a un árbol lo debes podar cuando hace más calor.

Cuando hay una plaga, en lugar de sanar inmediatamente el árbol o planta afectada, con frecuencia se deja extender la epidemia, con lo cual después el tratamiento se hace más costoso y difícil.

Los árboles con frecuencia se dejan crecer con los troncos torcidos, por falta de apuntalarlos a su debido tiempo. Y algunos cuando se mueren en lugar de reponerlos se tapa el hueco con cemento.

Desconozco si esos desafortunados trabajos se hacen con personal propio del Ayuntamiento o contratos con empresas, pero sea como sea, los responsables serán técnicos del Consistorio, el Concejal respectivo y por último el Sr. Alcalde.

En resumidas cuentas con su manfutismo ni siquiera son capaces de mantener debidamente lo que se encontraron hecho.