Fotografía de banco de imágenes | Nando Martinez

Una vida saludable es un estilo de vida en el que disminuimos los riesgos de estar gravemente enfermos, así como de morir tempranamente. Es también una vida en la cual priorizamos nuestro bienestar físico, mental y social. Para mantener este equilibrio, justamente, no hace falta que desarrollemos al extremo una de las partes ya que puede conllevar abandonar otras. Un bienestar físico conlleva hacer lo que puedas para fortalecer tu cuerpo, por eso, para aquellas personas a las que más le cueste esta parte dejamos este artículo, en el que Julie Corliss, editora especialista de Harvard Heart Letter, propone un entrenamiento que, sorprendentemente, solo requiere una silla como equipo, eliminando la necesidad de acudir al gimnasio

El ejercicio se centra en mejorar el estado físico general y trabajar el tren inferior. Se inicia con la persona sentada en una silla, con las piernas ligeramente separadas y los pies bien apoyados en el suelo. Al inhalar, activa el núcleo apretando los músculos abdominales y, al exhalar, se levanta de la silla. El equilibrio se mantiene apoyando los talones y contrayendo los glúteos. Después de permanecer de pie, se inhala al sentarse y se repite entre 8 y 10 veces, descansando 30 segundos entre series.

Para adaptar la dificultad, se pueden utilizar sillas con reposabrazos para mayor apoyo o cruzar los brazos frente al cuerpo para aumentar el desafío. Mantener las manos sobre los muslos proporciona un nivel intermedio de dificultad.

A pesar de la creencia común de que el ejercicio de fuerza implica pesas, el propio peso corporal puede ser suficiente. Combinar ejercicios aeróbicos con ejercicios de fuerza ofrece beneficios que van más allá del aspecto físico. Además de prevenir la pérdida muscular relacionada con la edad, estos ejercicios fortalecen los músculos, mejoran la densidad ósea, reducen dolores comunes, fortalecen el sistema inmunológico y mejoran la calidad del sueño y el estado de ánimo.

Además del ejercicio de la silla, existen diversas alternativas para fortalecer diferentes grupos musculares, desde sentadillas hasta abdominales utilizando la silla como apoyo. La versatilidad de este equipo hace que sea una herramienta eficaz para mantenerse en forma sin requerir una inversión costosa.

Aunque estos ejercicios proporcionan beneficios notables, se destaca la importancia de buscar asesoramiento profesional para lograr cambios integrales y seguros en el estilo de vida, especialmente si el objetivo es perder peso de manera efectiva.