Una perspectiva para un transporte pesado de mercancías respetuoso con el clima: los combustibles sintéticos, derivados principalmente de biomasa, ya pueden reducir significativamente la huella de CO2 de los camiones con la combinación eléctrica actual. | INSTITUTO MAX PLANCK/ JOCHEN TAC

Un proceso de síntesis que permite producir un combustible, llamado HyFiT, a partir de biomasa o dióxido de carbono, puede utilizarse para repostar motores de combustión convencionales.

Investigadores del Instituto Max Planck de Conversión de Energía Química, la Universidad RWTH de Aquisgrán y la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, han combinado procesos que la industria química ya utiliza en muchos ámbitos para potenciar el uso de combustibles sintéticos para el transporte de mercancias pesadas.

Para que los camiones puedan transportar mercancías de forma respetuosa con el medio ambiente, se están desarrollando diversas tecnologías, entre las que se incluyen no solo los motores eléctricos con batería, sino también los combustibles sintéticos. Los camiones eléctricos tienen una huella de carbono especialmente baja en función de la combinación de electricidad, pero las baterías son grandes y pesadas, sobre todo si una carga dura más de 500 kilómetros, por lo que los combustibles sintéticos tienen una clara ventaja en este aspecto. Otro argumento a su favor es que se pueden utilizar en los vehículos actuales y con la infraestructura de repostaje existente, algo especialmente relevante en países en los que no habrá infraestructura de carga en un futuro previsible.

La pregunta es qué sustancias son las más adecuadas para un repostaje respetuoso con el medio ambiente y cómo se pueden producir de forma más eficiente. El equipo ha dado respuesta a esta pregunta en un estudio publicado en la revista especializada Nature Energy.

Los investigadores presentan una ruta de síntesis que permite la producción selectiva de diferentes mezclas de diésel sintético, es decir, hidrocarburos puros, los llamados alcanos, y alcoholes de cadena larga. Luego, el equipo probó qué mezcla se quema más limpiamente y se adapta mejor a los motores actuales.

Si el combustible se produce a partir de biomasa, en determinadas condiciones, la cantidad de CO2 emitida a lo largo de toda la cadena de producción y utilización es tan baja como la de un camión propulsado por batería. La evaluación del ciclo de vida total de los combustibles sintéticos también es comparable a la del funcionamiento con batería.

Además, el combustible HyFiT se puede adaptar para que su combustión produzca menos partículas finas y óxidos de nitrógeno que un diésel que cumpla la futura norma Euro 7, informa en un comunicado el Instituto Max Planck.