Una cámara registró el increíble error de 38 segundos, que mostró cómo el hombre se pegó un tiro.

Fue en el salón de la casa del fallecido, donde primero se apuntó a la cabeza con el arma y apretó el gatillo sin que pasara nada. Pero al repetir el gesto, se hizo un disparo en la cabeza.

La mujer del hombre de 40 años, al oír el ruido, salió a toda prisa y al encontrarlo malherido, marcó el teléfono de emergencia de ese país. Los sanitarios acudieron al sitio, pero el hombre murió en la ambulancia mientras lo llevaban.

El video causó conmoción en Taiwán y en internautas de todo el mundo que vieron las impactantes imágenes.