Una fotografía captó el momento en que el gran cetáceo la empuja con su enorme cabeza para ponerla a salvo fuera del agua, mientras otra ballena lanzaba coletazos al escualo para mantenerlo a raya.
El 'gigante' marino incluso la 'abrazó' con su aleta pectoral para cobijarla de los colmillos del tiburón, un gesto que para la estudiosa de las criaturas del mar pone de relieve el instinto de protección de las ballenas.
«Nunca toco a los animales que estudio pero durante 10 minutos esta ballena me empujó a través del agua». «Estaba segura de que iba a ser el día de mi muerte», escribió la bióloga en Facebook.
8 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
por cierto, Alguien ha visto la foca monje?
Mmmmmmm, no sé, no sé. Hace unos años aquí en aguas del Toro, los centros de buceo para turistas, se inventaron que apareció una foca monje en una cueva marina, después solicitaron una reserva marina. Lo que no explican es que ellos como empresarios tienen intereses en la zona.
Y luego el tiburón se zampó al que hacia la foto...
También los tiburones tienen derecho a comer.
Una historia bonita. No puedo entender la masacre a las ballenas ni las caceras en África ni en nuestro país..hay ciertos humanos que se merecen que se les llame animales.
un motivo más para no cazar ballenas
Jo no veig ni tant sols el tauró.
Una bonita historia o un cuento chino, cualquiera de las dos suposiciones podría ser cierta. La foto no da para mucho. Yo me inclino por la segunda y sugiero que le consulten a nuestra insigne y nunca bien ponderada bióloga Anita Obregón.