El inspector de Policía Nacional que resultó gravemente herido al ser embestido el vehículo policial en el que viajaba en Algeciras (Cádiz) por el coche de unos narcotraficantes en 2020 se ha reincorporado este martes al servicio, casi cinco años después de los hechos.
Sus compañeros le han recibido con aplausos emocionados en la comisaría de Algeciras, donde, entre otras cosas, han entregado al inspector Fran su arma reglamentaria, con la que vuelve al servicio.
«Cuando estaba en la UCI, estaba muy mal, mi madre me dijo: 'Fran cuando te fuiste a Algeciras tu padre y yo estábamos muy preocupados porque pensábamos que te ibas solo, lo que no sabíamos es que allí tenías una familia tan grande. Quiero daros las gracias a todos vosotros por hacer de esta mi familia», dice el inspector a sus compañeros en un vídeo que la Policía Nacional ha difundido en sus redes.
«Hoy vuelvo aquí, a Algeciras, a mi casa, donde prometo desempeñar mi labor lo mejor posible», afirma también.
En una nota de prensa, el sindicato JUPOL expresa su «máximo reconocimiento y apoyo» para este inspector que «a pesar de las gravísimas lesiones sufridas, se negó a aceptar una jubilación anticipada y ha luchado estos casi cinco años por volver a ser útil para la Policía Nacional».
El inspector resultó gravemente herido el 5 de septiembre de 2020 cuando unos narcos arremetieron con un coche de alta gama contra el vehículo policial en el que circulaban junto con un agente en prácticas que afrontaba su primer día activo en la Policía Nacional.
El pasado mes de agosto, la Audiencia Provincial de Cádiz condenó a los autores del atropello a 28 años de cárcel y el pago de una multa de dos millones de euros.
«En concreto, la sentencia condena a Isaías Mora a dos penas de 12 años de prisión por dos delitos de asesinato en grado de tentativa, a otros tres años y seis meses por un delito contra la salud pública y a ocho meses de cárcel por un delito de receptación. Del mismo modo, se impone pena de tres años y seis meses a Aleix Ordóñez, otro de los acusados, y condena a Mohamed Ahmed a un año de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas», recuerda Jupol, sindicato que ejerció la acusación popular en el proceso contra los acusados.
La organización sindical, que consideró aquella condena «ejemplarizante», espera que «sirva para acabar con la sensación de impunidad con la que actúan los narcos en el Campo de Gibraltar y resto de provincia de Cádiz» e insiste en la necesidad de poner en marcha la Zona de Especial Singularidad en el Campo de Gibraltar, así como en la provincia de Cádiz, para reforzar los medios en la lucha contra el narcotráfico en esta provincia, así como la declaración de profesión de riesgo para la Policía Nacional.
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