Se acreditó que la enfermedad se desencadenó por la exposición continuada a los excrementos de las aves. | Jaume Morey

La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha confirmado la situación de gran invalidez de una informadora turística afectada de un fibrosis pulmonar severa causada por su exposición a los excrementos de palomas cuando trabajaba en la plaza Catalunya y en La Rambla de Barcelona.

En la resolución de un recurso presentado por el Consorcio de Turismo de Barcelona, Barcelona Activa y las aseguradoras, el tribunal confirma que, si la trabajadora «no hubiese estado trabajando en esas oficinas al aire libre, no habría contraído la enfermedad».

«Estaba inhalando de forma directa el olor de los excrementos de las palomas», confirma el tribunal, que recuerda que la empleada trabajó para Turisme de Barcelona entre 2008 y 2010.

El fallo del TSJC determina el origen profesional de la enfermedad y confirma la invalidez en grado de 'gran invalidez', que es el que se otorga cuando la gravedad de las dolencias sufridas provocan la necesidad de la ayuda de terceros para realizar labores cotidianas.

El TSJC da credibilidad a los informes médicos que vinculan como única causa desencadenante de la enfermedad la exposición a estos excrementos, y constata la existencia de diversos informes de los servicios de prevención de la empresa y de Inspección de Trabajo que veían necesario un cambio del puesto de trabajo que nunca se llegó a producir.