En materia de seguridad, los trabajadores han logrado el compromiso de la DGT para que el resultado de los exámenes sea comunicado directamente al profesor de la autoescuela y nunca en presencia del alumno. Asimismo, el departamento que dirige María Seguí ha señalado que, en un plazo de dos meses, los resultados se harán públicos en una web.
En cuanto a la parte retributiva, los sindicatos apuntan que Seguí se ha comprometido a aprobar una productividad especial transitoria, que tendrá su reflejo en la nómina para compensar el exceso en la carga de trabajo. Esta retribución entrará en vigor en enero, según ha señalado CSIF.
De la misma manera, la directora se ha comprometido a realizar una declaración pública en la web del organismo, para garantizar que los exámenes de conducir sigan teniendo un carácter público y por tanto, no serán privatizados.
Por otra parte, CSIF ha agradecido el apoyo y el esfuerzo realizado por el colectivo de examinadores a lo largo de más de 30 días consecutivos de huelga. «Sin ellos, no hubiera sido posible este acuerdo», apunta el sindicato en un comunicado.
CSIF también ha pedido «perdón» a los ciudadanos que pudieran haberse visto afectados por la huelga. Los examinadores se comprometen a realizar un esfuerzo para ponerse al día para cubrir los 60.000 exámenes que, según sus cifras, se han visto cancelados o aplazados con la huelga.
Huelga desde el 14 de septiembre
La decisión de desconvocar el paro ha llegado después de la tercera reunión mantenida entre el colectivo y la DGT, celebrada el pasado lunes 26 de octubre, y en el que se llegó al acuerdo. La Dirección General de Tráfico llamó a los examinadores a la reunión el mismo día en el que un centenar de funcionarios se manifestaron ante la sede del organismo, cuando se cumplía casi un mes del inicia de la huelga (el 14 de septiembre).
A lo largo de estos 32 días, los examinadores han parado durante 3 horas diarias su jornada laboral, con un seguimiento del 70 por ciento, según CSIF, y un 28 por ciento, según la DGT. Con esta protesta, los examinadores reclamaban mayor seguridad, tras denunciar que recibían agresiones de los alumnos cuando no aprobaban los exámenes; una subida de sus retribuciones, así como una reducción del máximo de pruebas a realizar al día por cada trabajador, de 13 exámenes a 12.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.