Ibiza esconde uno de sus mayores secretos en el corazón de Santa Gertrudis. Un restaurante donde poder disfrutar de una gastronomía de alto nivel en un entorno tranquilo, elegante y acogedor.

En Finca la Plaza cada velada y cada día es un éxito, ¿su secreto? la pasión. Se trata de una oferta muy cuidada, con una carta en la que cada especialidad está trabajada con mucho cariño y en la que los chefs eligen cada día lo mejor del mercado, dando prioridad a los productos autóctonos.

Esta temporada, algunas de las novedades son la ensalada de brócoli con espárragos, salsa de tahini con naranja y berenjena hecha al carbón con stracciatella con higo; el pulpo a la parrilla con patatas y salsa de apio; el plato estrella de este verano es el solomillo Wellington.

Su cocina está inspirada en los sabores mediterráneos y rinde homenaje a la autenticidad de los ingredientes en un ambiente elegante y relajado.

En este restaurante acertarás seguro con el maridaje y es que posee una de las bodegas más importantes de la isla con 180 etiquetas diferentes.

Con un acogedor interior y un exterior ideal para saborear cócteles al atardecer y para cenar bajo las estrellas, se respira algo realmente especial en esta joya rústica donde el tiempo parece dilatarse.

Bajo la dirección de Gennaro Vitto, director de Food & Beverage de Island Hospitality, y de la ejecución del chef Sergio Cerdeñosa junto a su equipo, su menú se convierte en un viaje a los ingredientes locales lleno de referencias a los paisajes rurales mediterráneos que rodean este especial enclave. Manteniéndose fieles a su filosofía, la propuesta gastronómica evoluciona con la temporada a través de los aromas, sabores y texturas para deleitar el paladar del comensal.   

El menú presenta entre 20 y 25 ‘platos de autor’ elaborados de forma íntegra en la cocina de Finca La Plaza por su talentoso equipo. Como final dulce, proponen una carta de postres entre los que se encuentran: una receta clásica del Tiramisú, perfecta para compartir; un cremoso ligero de queso con ganache, coulis de frambuesa y crunchy de chocolate; y un helado de avellana con crumble de haba tonka y crocante de paillete y avellana. También tienen opciones veganas.

Merece una mención especial la amplia oferta de cócteles, disponibles para disfrutar al atardecer o incluso en una buena sobremesa dejando que la conversación fluya.

Para complementar una maravillosa velada, los martes, miércoles y jueves cuentan con música en directo. La calidez, el encanto y la hospitalidad que se respira en el restaurante son los valores y los verdaderos ingredientes de Finca la Plaza, que hace que los comensales se sientan como en casa generando un ambiente relajado con el que disfrutar de una mágica noche ibicenca.