El congreso trató diferentes temas que afectan e interesan al sector de las viviendas vacacionales en Eivissa. | ARGUI ESCANDON

La Asociación de Viviendas Turísticas de Ibiza y Formentera (AVAT) ha celebrado este mes de octubre la novena edición del Congreso de Viviendas Turísticas, una cita que ha organizado con la patronal Pimeef y el apoyo del Consell d’Eivissa y del Ayuntamiento de Santa Eulària. En esta cita, se abordaron diferentes temáticas y aspectos relacionados con la comercialización de las viviendas turísticas con importantes profesionales del sector, así como políticos, representantes institucionales, además de ofrecer ‘píldoras informativas’ interesantes para propietarios y comercializadores, como dudas jurídicas.

«La vivienda vacacional está viviendo un buen momento en las Pitiüsses. Es una oferta muy atractiva de alojamiento para quienes quieren tener una vivienda más independiente en el campo y estar más días. Hemos notado que alrededor de un 20% de las plazas turísticas que hay en el mercado son de viviendas turísticas vacacionales, que son una opción completamente válida y alternativa a lo que son los hoteles», explica Roberto San Esteban, presidente de AVAT, quien recordó que las diferentes asociaciones de viviendas vacacionales en Balears se han unido y han creado la Federación Balear de Viviendas Turísticas para defender sus intereses ante la nueva Ley General Turística que va a elaborar y aprobar el Govern el año que viene. En este sentido, esta federación se ha marcado como objetivo recuperar 90.000 plazas de alquiler vacacional. En el caso de Eivissa es preciso señalar que hay 21.800 plazas de viviendas vacacionales autorizadas inicialmente, pero la cifra real actual ronda las 19.700. Y es que, según destaca San Esteban, hay entre 2.000 y 3.000 plazas que no están siendo usadas «o bien porque durante la pandemia optaron por el alquiler a largo plazo o bien se trata de propietarios que se han ido a vivir a sus casas, o bien son casas que se han vendido a extranjeros y que no se comercializan». En este punto, desde AVAT lanzaron la propuesta en el citado congreso al Consell d’Eivissa y al Govern de «reciclar estas licencias para que vuelvan al mercado para ser explotadas».

Congreso de Viviendas Turísticas
Roberto San Esteban, presidente de AVAT, durante una de sus intervenciones.

A las entre 2.000 y 3.000 licencias que están concedidas pero no están siendo explotadas se suman alrededor de otras 700 que cuando entró en vigor el DRIAT del Consell tenían que subsanar una serie de cuestiones y, finalmente, entró en vigor la moratoria de plazas y a estas 700 plazas se les denegó la autorización definitiva y no pudieron volver a formar parte de la bolsa disponible de plazas. «Hemos expuesto esta situación en la segunda jornada del congreso y pienso que el feedback ha sido positivo», precisa el presidente de AVAT, quien afirma que ya ha tratado esta propuesta con los representantes del Consell d’Eivissa y este primer contacto «ha sido positivo, hay buena predisposición», si bien destaca que no concretaron plazos ni cantidad con la máxima institución insular. En este punto, San Esteban deja claro que desde AVAT no persiguen un aumento de plazas vacacionales, sino que se reciclen las que en su momento se dieron y no se están usando para que vuelvan a salir al mercado.

LOS DATOS. Una de las charlas que se ofreció en el Congreso de AVAT fue la de Raúl Castillo, responsable de geodatos del metabuscador de viviendas vacacionales Holidu. Así, los datos de los Consells de Eivissa y Formentera revelan que hay 2.466 viviendas vacacionales en Eivissa y 1.374 en Formentera, más de la mitad. Según esto, la pequeña de las Pitiüses destinaría el 19,36% de sus inmuebles a la oferta turística frente al 3,12% de Eivissa. Por su parte, el INE altera estos resultados: Formentera cae en número de viviendas hasta las 817, representando un 11,46%, y Eivissa aumenta su cifra a los 3.375 alojamientos, alcanzando el 4,27%. Por municipios, el total de viviendas refleja que de las 26.485 de Vila un total de 52 serían vacacionales, según los datos que maneja el Consell, y el INE eleva la cifra a 443. En el caso de Santa Eulària hay 20.740 hogares, de los cuales 832 son turísticos según el Consell y 941 tienen esta categoría, según el INE. Estas variaciones continúan: 16.585 viviendas en Sant Josep, 882 vacacionales registradas por el Consell y 1.302 datadas por el INE; 11.979 en Sant Antoni, 337 turísticas que el INE aumenta a las 400; y 3.192 en Sant Joan, donde el Consell tiene registradas 263 vacacionales y el INE 289. Pero el dato más revelador que ofreció Castillo es que cada vivienda vacacional ingresa en Eivissa una media anual de 71.600 euros, lo que quiere decir que los ingresos por estancias de todo el sector se elevan a los 150,6 millones en el último año. «De todos los destinos en los que trabaja Holidu, Eivissa es donde más se ingresa por cada inmueble, seguida por Mallorca», afirma Castillo. El precio medio por día de la estancia es de 318,4 euros, si bien Castillo avisó de que en temporada alta la cifra se dispara mientras que en invierno baja.

Otro de los puntos sobre los que se reflexionó en este Congreso es la marca Eivissa y su imagen como destino de excelencia. Vicent Marí, presidente del Consell d’Eivissa, quiso destacar durante su intervención la colaboración público-privada, así como el compromiso de las instituciones en la lucha contra el intrusismo. En este sentido, hasta el momento se han incautado 1,5 millones por infracciones en ordenación turística. Marí quiso dejar claro, además, que la vivienda vacacional legal y reglada no es la responsable de la saturación y la falta de vivienda disponible, sino aquella que ejerce la actividad de forma ilegal. En esta misma línea se expresó Raúl Sierra, gerente del hotel de cinco estrellas Ibiza Gran Hotel, que también participó en este debate y añadió que no sólo el intrusismo deteriora la oferta sino que también lo hacen los «actores nuevos». «Todas estas empresas oportunistas que no trabajan por la excelencia morirán en unos años, mientras que los que reinvertimos cada año por mejorar la calidad aguantaremos», insistió Sierra. Alfonso Rojo, presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa Pimeef, afirmó que la excelencia es «llegar a un sitio y que las cosas funcionen», además de que los visitantes se marchen contentos con la experiencia vivida.