El hotel, de cinco estrellas, está situado en el casco antiguo de Palma.

El Hotel Es Príncep, de cinco estrellas, transpira tranquilidad y exclusividad. El primer gran lujo del establecimiento es su ubicación. Situado sobre el Baluard del Príncep, muy cerca del centro de la ciudad, tiene unas excelentes vistas a la bahía de Palma y a la muralla. Propiedad de la familia Mairata, el mundo de la hostelería no es nuevo para los hermanos Isabel y Jaume, que han recogido ya el testigo de sus padres. De hecho, explotan también el aparthotel La Pérgola y el Hotel Mon Port, ambos en el puerto de Andratx. El hotel ofrece el lujo de la sencillez y pretende que los clientes se sientan como invitados. “Queremos atender a nuestros clientes como las abuelas atendían a sus visitas”, argumenta Isabel.

La historia familiar está vinculada desde siempre a Industrias Mairata, una empresa de renombre, con una larga y exitosa trayectoria en el mundo de la carpintería metálica. Gabriel y Catalina, los padres de Isabel y Jaume, aunque ya jubilados, no dejan de ejercer como empresarios. Isabel coordina la actividad hotelera y en estos primeros meses de actividad centra su atención en Es Príncep. Jaume, que es el menor de los hermanos, se encarga habitualmente de la parte industrial, aunque el establecimiento de nueva apertura ha requerido también su atención casi en exclusiva.

Tener presencia en Palma era una antigua ilusión de la familia Mairata. Es Príncep es así un sueño, una ambición cumplida. “Ha sido un proyecto muy buscado. Hacía años que queríamos estar en Palma. Queríamos hacer un producto de gran calidad y que pueda estar abierto los doce meses. Esperamos hasta que surgió la posibilidad de hacer este proyecto, que nos enamoró desde el primer momento”, asegura Isabel.

El proceso de construcción de un hotel nunca es sencillo. El camino ha sido largo y no exento de obstáculos. “El solar era propiedad del Ibavi. Un día se presentaron en nuestras oficinas los arquitectos Se Duch y Xisco Pizá, informándonos de su existencia y de las posibilidades de construir un hotel allí. Nos encantó la localización y compramos el solar en una subasta. Después, adquirimos una planta baja al lado y un edificio anexo. Queríamos hacer un hotel de 5 estrellas clásico y lo hemos conseguido”, afirma.

El solar se compró en 2012, pero no fue hasta 2015 cuando comenzaron las obras y fue el 14 de febrero de 2018 cuando se abrió el hotel.

La totalidad de las habitaciones son lujosas y elegantes, muy luminosas y con extraordinarias vistas. El uso de la pieda, la madera y el cuero evoca las casas señoriales mallorquinas. Diferentes habitaciones están adornadas con diferentes obras pictóricas de Rafa Forteza, que decora también las zonas comunes del hotel.
El establecimiento, que cuenta con 68 habitaciones, dispone de una extensa oferta culinaria, que por sí sola ya es un aliciente para visitar Es Príncep.

Tres restaurantes adornan el hotel. El Mura es un bistró clásico, que está abierto todo el día. La terraza superior del edificio alberga el Almaq, junto a una zona de copas. La gran apuesta gastronómica es el Bala Roja, con entrada desde la calle del mismo nombre, y que pretende ser un restaurante con aspiraciones. Abre de martes a sábado, pero de momento solo por las noches.

“Todos nuestros servicios gastronómicos están capitaneados y supervisados por Andreu Genestra, que marca la pauta a Felip Moreno, que es el chef principal”, afirma Jaume.

Es Príncep pretende ser un hotel abierto a la ciudad, en el que los residentes se sientan también como en casa. Además de la oferta gastronómica, el establecimiento cuenta con la coctelería Gremium, con entrada desde la calle, y al mando del menorquín Andreu Genestar, que abre cada día desde las 15.30 horas y hasta pasada la medianoche.

Una zona de la azotea se encuentra acotada para eventos. Dispone de un servicio propio y no interfiere en el normal desarrollo de la actividad de los clientes.

El establecimiento cuenta con diferentes salas de reunión para sus clientes, dotadas de todo el material tecnológico necesario para llevar a cualquier tipo de sesión de trabajo.

El hotel dispone también de un parking exclusivo para clientes, además de un pequeño gimnasio. Isabel y Jaume están especialmente satisfechos del resultado final de la zona de relax. Cocó Spa Oasis, que mantiene abierto desde las 07.00 de la mañana hasta las diez de la noche, ofrece todo tipo de servicios terapéuticos y de belleza en sus cabinas de tratamiento.

Es Príncep comparte florista con los otros dos hoteles de la familia, aunque tiene centrada su actividad en el establecimiento de Palma. Una orquídea adorna cada una de las habitaciones del establecimiento, que cuenta con una abundante decoración floral en sus zonas comunes.

CLIENTES. La tipología del cliente, aunque la apertura aún es reciente, es diversa. El establecimiento, que no es un only adults, es evidente que está destinado a clientes de alto nivel económico. La comercialización es diversa, con especial incidencia en la venta directa. “No renunciamos a los touroperadores tradicionales, con los que comercializamos una parte del hotel. Contamos también con las OTA, que tienen ya gran importancia, aunque intentamos potenciar la venta directa, que es nuestro gran reto”, argumenta Isabel.

El hotel Es Príncep forma parte de la red The Leading Hotels of the World. Se trata de un sello de calidad dentro de la hostelería de lujo de la que en Mallorca solo forman parte el Gran Meliá de Mar y el Castell Son Claret, además del nuevo establecimiento de la familia Mairata. Formada por más de 375 hoteles en 75 países, The Leading Hotels of The World fue fundada en 1928 con solo 38 miembros. Para formar parte de la lujosa colección de hoteles, los establecimientos deben contar con los estándares más exigentes de calidad en cuanto a alojamiento, servicio, gastronomía, comportamiento de sus empleados e instalaciones. Es Príncep pasó por una rigurosa inspección, cuyo reporte fue presentado ante el comité ejecutivo, que aprueba o declina la incorporación de nuevos establecimientos.

El hotel cuenta ya con más de una cuarentena de trabajadores y las previsiones apuntan a que en temporada alta alcanzarán los 80.

CASUALIDAD. “La familia llegó al mundo de la hostelería de casualidad. Mis padres hicieron una inversión en el Port d’Andratx, donde construyeron 32 apartamentos coincidiendo con la crisis de los 80. Solo se vendió una vivienda y para darle una salida económica decidieron volver a comprar la vivienda y hacer apartamentos turísticos. Así nació La Pérgola en el año 1985, que fue explotada por un socio”, explica Jaume con la anuencia de Isabel. Los apartamentos fueron creciendo, se construyó una nueva recepción, una gran piscina y la familia Mairata recuperó la gestión en 1995, ya como aparthotel. Entonces, tenía unas 50 habitaciones y ahora tiene 110. “Poco a poco fuimos comprando las casas vecinas y así pudimos crecer”, asevera Jaume. “Ha sido un establecimiento en constante evolución. De hecho, hace ahora cuatro años, se reconstruyó por completo el edificio principal, que alberga la zona de servicios comunes”, asegura Isabel.

En 1999, la familia Mairata tuvo la oportunidad de comprar un solar, también en el Port d’Andratx, y justo al lado de La Pérgola, donde construyeron el Mon Port. Son establecimientos diferentes, dirigidos a mercados variados, aunque la importancia de la venta directa va en aumento. La Pérgola ya está abierto todo el año, mientras que el Mon Port lo hace durante nueve meses.

Estos empresarios comercializan de forma separada sus tres hoteles, aunque no descartan crear una pequeña cadena en un futuro. “Con independencia de las estrellas, nuestros establecimientos tienen en común unos estádares de calidad muy altos. Son productos muy diferentes, pero no descartamos crear una cadena en un futuro”, explica Isabel, que asegura que ya intentan aprovechar lassinergias que supone contar con tres establecimientos.

La familia tiene tres hoteles: Es Príncep, La Pérgola y Mon Port. La intención es ampliar próximamente el número de establecimientos, aunque nada se ha concretado por ahora.

INDUSTRIAS MAIRATA. La empresa Industrias Mairata, radicada en Son Ferriol, es conocida por su dilatada trayectoria. “Mi padre comenzó con Industrias Mairata en los años 60. Hacemos puertas y ventanas, además de todo tipo de cerramientos. Ahora estamos enfocados hacia el mercado residencial de lujo, pero hacemos todo tipo de hoteles, viviendas...”, explica Jaume.

Industrias Mairata, que cuenta con 75 trabajadores, ha desarrollado un nuevo producto, denominado Home of Horizon. “Es la respuesta a las reiteradas peticiones de los arquitectos, que quieren grandes ventanales, sin perfil ni marco. Quedan completamente integradas. Es un producto desarrollado por nosotros, que cuenta con fibra de carbono y fibra de vidrio”, afirma.

La empresa industrial tiene en la actualidad delegaciones en Menorca y Eivissa, además de contar con diferentes partners para Home of Horizon en Valencia, Girona, Londres, Cannes y en la localidad de Chandigarh en la India.