Este martes por la noche se presentó en la sede del Institut d'Estudis Eivissencs, situado en el número 29 de la céntrica Via Púnica de la ciudad de Ibiza, el libro de fotografías Eivissa 1960. Albert Schwartz. 32 dies retratant l'illa.

La presentación corrió a cargo del expresidente del IEE, Marià Serra, Ferran Nogués y Josep Costa Marín, y contó con un numeroso público, entre los que destacó la presencia de autoridades como el conseller de Patrimonio, Cultura, Deportes y Juventud, David Ribas, o la directora del Arxiu Històric Municipal del Ayuntamiento de Ibiza, Fany Tur.

Ferran Nogués y Josep Costa Marín hicieron una descripción técnica de las fotografías que aparecen en este libro, explicando a los presentes que aunque este alemán «no era un fotógrafo profesional media muy bien la luz y encuadraba perfectamente las imágenes».

Además, los dos destacaron que estas fotografías nos han llegado «debido a la gran calidad de los negativos, de formato medio de 6 por 6 centímetros que aún se conservan de la colección privada del propio Albert Schwartz». En este sentido, ambos resaltaron que «el utilizar un objetivo Leitz Elmar le permitía no ser demasiado intrusivo y fotografiar sin que se dieran cuenta, puesto que recordemos que quería documentarse como un antropólogo».

Concretamente la cámara que utilizaba para tomar las fotografías era una alemana Leica de 35 milímetros, las mismas que «se utilizaban para la publicidad en aquella época».

En este sentido, el expresident del IEE, Marià Serra, deleitó a todos los presentes con una explicación, detallada y con muchos personajes y anécdotas reales, como era la sociedad en aquellos años en Ibiza. Una sociedad que él mismo vivió a sus diecisiete años y «que reflejaba muchos cambios, entre ellos el paso de una sociedad agraria a otra de servicios»

Un fotógrafo de 24 años

Albert Schwartz llegó a Ibiza en marzo de 1960. Tenía veinticuatro años y según explica el Institut d'Estudis Eivissencs, «el dinero contado, dos cámaras de fotografías, unos estudios de antropología en proyecto y diecisiete carretes para fotografías». Con todo ello se animó a visitar la isla durante treinta y dos días y fruto de ello son las fotografías que llevó a cabo de su paisaje, y sobre todo, de las personas que en aquella época residían en la isla de Ibiza.

Lo cierto es que Schwartz reveló los carretes pero no llegó a positivarlos nunca porque no tenía dinero, con lo que esos negativos quedaron olvidados dentro de un cajón. Sin embargo, en el año 2011, después de una grave enfermedad, cuando revisó todos sus papeles y comenzó a escanear los negativos que tenía guardados, encontró las imágenes y decidió ofrecérselas al Institut d'Estudis Eivissencs, donde gracias a la labor de identificación y secuenciación de trescientas fotos por parte de Marga Torres, Nina Ferrer y Marià Serra se pudo crear un proyecto pedagógico e histórico con fotografías y textos que ha dado como resultado este libro Eivissa 1960. Albert Schwartz. 32 dies retratant l'illa, editado por el propio institut y maquetado por Surumbam Ediciones.