Hasta el próximo 16 de diciembre estará abierta al público en el centro sociocultural s'Alamera (Vara de Rey) la exposición Darreres pinzellades, de Vicent Calbet. Una amplia selección de la serie de inspiración taurina que el pintor ibicenco llevó en 1994 a Japón para exponer; falleciendo antes de poder hacerlo en el domicilio de sus anfitriones, en Fukuoka, el matrimonio Ara y Satoko Obana, propietarios de la obra, quienes el pasado año organizaron en su ciudad un sentido homenaje al malogrado artista.

La coordinadora de las actividades de s'Alamera, Lina Sansano, explicó ayer a este periódico el por qué de esta exposición: «Es el resultado de una oferta que hace un año nos ofreció el matrimonio Obana, muy interesados en que pudiera verse en su isla la última obra de Calbet, que me parece espectacular. Para nosotros es un honor, y nos sentimos muy honrados con la propuesta», precisó Sansano, añadiendo: «Curiosamente, Vicent Calbet empezó con la figuración y acabó con abstracto, pero aquí se fusionan ambos estilos».

Por razones de salud, el conseller de Cultura, Marià Torres, no pudo asistir ayer a la inauguración. Y por el mismo motivo, tampoco pudo hacerlo Arao Obana, aunque sí su esposa Satoko, quien se mostró encantada del montaje en s'Alamera. «Ha quedado muy bonita. Hace 15 años que los cuadros estaban en Japón, nadie los había visto aún en la isla; así que me alegró de que al fin una obra tan hermosa, en la que Vicente puso toda su alma, se pueda ver en su tierra natal. Estoy muy contenta, como lo está mi marido, pues supone la culminación de un sueño, algo que deseábamos hacer desde 1994», aseguró Satako Obana, agradecida al Consell d'Eivissa y a todos los que han colaborado en esta hermosa muestra.