Ramón Tur, Eva Maria Juan y Javier Sánchez, tres de los ganadores. Foto: GUILLERMO ROMANÍ

GUILLERMO ROMANÍ

El Consell de Formentera hizo entrega ayer de los premios de la séptima edición del Concurso de Fotografía Beni Trutmann con motivo de su fallecimiento hace siete años en la Formentera. Isla en la que el fotógrafo suizo residía y que fotografió de manera exhaustiva compilando un corpus de imágenes de la vida, las costumbres, las tradiciones y el entorno de la isla de las últimas décadas absolutamente impagable y que constituye un legado histórico de los últimos 40 años de la vida de Formentera.

En esta edición, que se limitaba únicamente a dos categorías, color y blanco y negro, aunque con un sustancial aumento en los premios, hubo dos grandes vencedores: Javier Sánchez Gómiz y Jake Sadhu Abbot, ya que el primero de ellos se impuso en la categoría de fotografía en blanco y negro y obtuvo el segundo lugar en la categoría a color; mientras que Javier Sánchez ganó en la categoría color y fue segundo en la de blanco y negro. Por eso cada uno de ellos recibirá un total de 800?, 500? por imponerse en una categoría y 300, por quedar segundo clasificado en la otra. En tercer lugar de cada una de las categorías quedaron Eva Maria Juan Juan en blanco y negro y Ramón Tur Marí en color, que recibirán 200? por los trabajos presentados al certamen que organiza el Consell.

El VII Concurso de Fotografía Beni Trutmann ha contado con una participación de 67 fotógrafos, que han presentado un total de 198. Los miembros del jurado han sido un miembro de la OCB de Formentera, uno del GOB de Formentera y tres personas de reconocida experiencia en las artes visuales. Todos, bajo la presidencia de la consellera de Cultura, Sònia Cardona, como presidenta del jurado aunque sin voz ni voto. Las obras premiadas quedarán en posesión del Consell de Formentera que podrá utilizarlas en cualquiera de las formas gráficas que crea oportunas, posters, carteles, internet. Por otra parte, el Consell se compromete a realizar una exposición de las mejores imágenes presentadas, las ganadoras y las de mayor calidad, en la Sala d'Exposicions de l'Ajuntament Vell entre el 4 y el 20 de mayo.

Este premio se creó, según recordó tiempo atrás la consellera de Cultura, en reconocimiento a la labor del fotógrafo suizo y para animar a la sociedad a seguir participando de una iniciativa de interés sociológico, ecológico y cultural con la que se pretende concienciar a los residentes de la isla, de la maravilla del paisaje y el entorno pero al mismo tiempo debe servir de denuncia ante los peligros que el desarrollismo desmesurado puede comportar. Trutmann, con más de 30.000 fotos hechas en sus 44 de residencia total o parcial en la isla, hizo una intensa labor en la que se mezclaba la denuncia, la preservación de antiguas labores y costumbres, así como ofrecer vistas inéditas de la isla.

Karl Werner Thomas Trutmann, conocido por todos como Beni nació el 26 de noviembre de 1935 en Locarno (Suiza), cursando estudios superiores en la Escuela de Arte de Zurich, en la que descubre su vocación por la fotografía. Con 22 años viajó a París para trabajar como ayudante del fotógrafo Harry Meerson, y dos años más tarde se independizó como fotógrafo profesional. En 1958 visitó Formentera y quedó fascinado por los encantos de la isla de los que dejó tantos testimonios en sus instantáneas.

La trayectoria profesional de Beni Trutmann puede dividirse en dos periodos: la época publicitaria, que va desde 1965 a 1984, y la época de madurez y humanismo, comprendida entre 1985 y 1995. Falleció el en la casa que tenía en la Mola el 28 de abril de 2002.