MARÍA JOSÉ REAL

La cita con el santo más esperado, Sant Pepe Rock, arrancó con una selección cuidada de la mejor música local. Un poco de pop de Iván Doménech, el rock de Pota Lait y el sonido más original de Sa bluesmàfia sirvieron de presentación de esta nueva edición del Sant Pepe, celebrado durante la noche de ayer en el campo de fútbol de Sant Josep. El Ibiza New Sensation de Pota Lait, una acertada y curiosa mezcla de música electrónica con las castañuelas más tradicionales, consiguió que el público se atreviera con el estribillo al mismo tiempo que saltaban imitando a los integrantes de este grupo ibicenco, que también marcaron algunos pasos de ball pagès, con indumentaria tradicional incluida, al ritmo de uno de sus temas estrellas. Mientras tanto, la afluencia de entrada de público no cesaba y finalmente unas 2.500 personas, según la organización, se concentraron en el campo de fútbol para disfrutar de una velada musical variada, bajo un cielo lleno de estrellas y con la compañía de un ligero frío.

Tras más de tres horas de música local llegó el momento de las dos estrellas de la noche, M-Clan y Antonio Orozco. Y por fin la fuerza del clan más rockero invadió el escenario. «Bona nit Ibiza, ¿cómo estáis? Muchas gracias por venir», afirmó Carlos Tarque, mientras el sonido de la batería, la guitarra, los teclados y el bajo se mezclaban en una fusión musical que aumentó la adrenalina de sus más fieles seguidores, algunos de ellos tan y tan fieles que ayer fueron capaces de vivir una jornada maratoniana con tal de ver al grupo murciano desde primera hora del día, cuando el grupo se acercó al campo de deportes para hacer las pruebas de sonido.

Con este primer concierto de su nueva gira, los murcianos del clan repasaron temas tan conocidos por el público como Llamando a la tierra, Maggie despierta o Mario y presentaron algunas de las creaciones de su último trabajo, Espantapájaros. Así, la mayoría de los asistentes se sumaron a la voz del cantante en Roto por dentro, el primer single de este trabajo. Sin embargo, la locura se apoderó de los asistentes cuando sonaron los primeros acordes de la dulce lolita de M-Clan, Carolina. Con pandereta en mano, Carlos y el clan se despidieron del público ibicenco con otro de sus grandes éxitos, Quédate a dormir.

Y sí, algunos decidieron ir a dormir tras escuchar a sus ídolos mientras otros aguantaron despiertos para disfrutar de la poesía musical de Antonio Orozco, que arrancó su actuación con la fuerza de Solamente verdades. «¡Quiero esas manos arriba!. ¡Estáis todos detenidos, delincuentes!», exclamó mientras sus seguidores enloquecían y clamaban con «Ese Antonio, ese Antonio» a su ídolo. A este derroche de energía inicial se sumó otro de sus grandes temas, Quiero ser, también del álbum El principio del comienzo. "Bona nit Ibiza. Voy a hablar en castellano porque no quiero confundir el catalán con el ibicenco», explicó el cantante. Y llegó Cadizfornia con el tema La cuestión, muy cantado por el ferviente público orozquense. De su último trabajo también repasó temas como Tres corazones o Dime por qué. La intimidad y la emoción se expandió entre los asistentes cuando el cantante arrancó de su garganta las primeras palabras de Es mi soledad. Aunque, sin duda alguna, el sentimiento de Antonio llegó al público más que nunca con Devuélveme la vida, uno de esos temas que dan que pensar y sobre todo que sentir. Eso fue lo que hicieron todas las personas que ayer confiaron en el regreso del santo más esperado, ese Sant Pepe que devuelve noches mágicas de agradable compañía, sueños y ante todo buena música.