La película Obaba, de Montxo Armendáriz, es la que acumula más nominaciones.

MERCEDES CERVIÑO|EFE

Concha Velasco y Antonio Resines presentarán esta noche la gala de la XX edición de los Goya en una noche que repasará la historia de estos galardones, que han pasado de ser calificados de horteras a ser la mayor plataforma de promoción de cine español y que, en esta ocasión, parten sin clara favorita.

Si el pasado año «Mar adentro» entró en la historia de los Goya como la más premiada, con 14 galardones, este año no hay una película tan contundente como la de Amenábar y la noche desde el Palacio de Congresos de Madrid se presenta como una de las más desconcertantes, con una lista de candidatos muy repartida y sin un filme que haya acaparado tanto clamor como la del año pasado.

La gala, que comenzará a las diez de la noche y será retransmitida en directo por la primera de TVE, y ha sido escrita y dirigida por Fernando Méndez Leite, con la ayuda de Manuel Martínez Velasco, será, en palabras del realizador, «vistosa, muy visual, ágil, directa, entretenida y con alguna sorpresa». No habrá música en directo ni números musicales y entre la entrega de los premios se intercalarán vídeos que recordarán las anteriores ediciones, en orden cronológico. «No es una historia de los Goya», señaló Méndez Leite, quien añadió que los vídeos se limitarán a mostrar la película ganadora de cada edición así como a hacer un repaso a los momentos claves de estos premios. De ahí que los encargados de entregar los galardones sea un plantel de primeros actores, y algún director, marcados por la historia de estos veinte años, en un intento de unir recuerdo y presente.

Los Goya nacieron casi a la par que la Academia de Cine y la primera gala se celebró en 1987 en un teatro de la Gran Vía madrileña, con más pena que gloria, a pesar de contar con la asistencia de los Reyes, al ser tomados como una mala copia de los Oscar. Pero, con el tiempo, se han ganado a pulso su sitio y se han convertido en la mejor plataforma para una película, cuyo número de premios, incluso de candidaturas, tiene una traducción directa en la taquilla. «Obaba», de Montxo Armendáriz, es la que más candidaturas acumula, diez.