Equipo del filme «7 Vírgenes».

EFE|SAN SEBASTIÀN

El actor norteamericano Willem Dafoe, que ayer recibió el premio Donostia del Festival de Cine de San Sebastián, dijo que su carrera se ha guiado por «acercarme a los directores y servir a sus historias».

Dafoe comentó ayer que «hay actores que buscan materiales que apoyen a su persona y la manera en que son ellos, y en cambio yo prefiero depender del material y transformarme en función del papel». Esta filosofía le ha permitido trabajar en proyectos tan dispares como «El paciente inglés», «Arde Misisipí», «Platoon» o «Spiderman», que le ha granjeado fama de actor camaleónico. Sobre su trayectoria, Dafoe recuerda que «la gente siempre ha dicho que fue fundamental mi participación en 'Platoon' -de Oliver Stone-, pero también valoro 'Vivir y morir en Los Angeles', de William Friedkin, porque fue una película que a los directores les gustó mucho y me abrió muchas puertas».

Con una humildad poco común entre actores de su talla, afirmó que «creo que todos los directores que piensan en mí es porque ellos saben que yo quiero trabajar con ellos». En su filmografía hay películas de los grandes estudios («Spiderman», «Peligro inminente» o «Calles de fuego») y producciones independiente («La sombra de un secuestro», «Basquiat» o «American Psycho»). Precisamente, la organización del Festival ha valorada esa combinación de trabajos de dentro y fuera del sistema al pensar en Dafoe como uno de los dos premios Donostia 2005, junto con Ben Gazzara. «El premio Donostia significa un ánimo y un aprecio del que estoy muy orgulloso», apuntó Dafoe, que además presenta en el festival su último filme, «Before it had a name», de su compañera sentimental, la realizadora Giada Colagrande.

Por otra parte, la Sección Oficial del Festival ofreció ayer dos películas que abordan dos realidades crudas, aunque dispares, pero relatadas a golpes de humor e ironía. «7 Vírgenes», del español Alberto Rodríguez, se pega a la realidad con una trama cruda, que subyace bajo unos diálogos cargados de ingenuidad, ironía y humor. Juan José Ballesta es el protagonista del filme cuyo reparto se completa con jóvenes de los barrios marginales sevillanos entre los que destaca Jesús Carroza. El otro filme fue «Verano en Berlín», de Andreas Dresen, la historia de dos mujeres jóvenes que intentan sobrellevar su vida, por muy dura que ésta sea.

En la sección Zabaltegui se presentó el documental «Inside Deep Throat», de Fenton Bailey y Randy Barbato, sobre el primer filme porno de culto, «Garganta profunda», (1972).