Nito Verdera participó hace unos días en un simposio sobre Colón celebrado en el Castillo de la Mota.

Eivissa acogerá el próximo año un simposio internacional sobre la lengua madre de Cristóbal Colón. «Probablemente sería en Semana Santa e intervendrían un especialista italiano, dos catedráticos de Filología de la Universidad de Valladolid, un portugués, un gallego y un catalán; además de Marià Torres, que está haciendo una recensión de mi libro 'Cristóbal Colón catalano parlante', y yo mismo, claro», explicó ayer a este periódico Nito Verdera, quien lleva muchos años tratando de demostrar el origen ibicenco del descubridor de América. «La cosa está aún en el aire, porque hay que buscar un buen patrocinador, que creo debería ser el Consell Insular», añadió.

El investigador y periodista ibicenco ha participado hace unos días en un simposio internacional sobre el «V centenario de Cristóbal Colón», celebrado en el Castillo de la Mota (Medina del Campo), y en el que han participado expertos en la figura del almirante. «Los análisis del simposio se han centrado en la iniciativa descubridora de Colón, su cartografía, las culturas precolombinas, la organización social, política y económica de la época, así como de la cultura y la religión».

La ponencia presentada por Nito Verdera fue sobre «El juicio crítico al utópico Colón mallorquín». Verdera ha encontrado nuevos datos que, a su juicio, desmontan por completo la teoría de que Colón fuera hijo bastardo del príncipe de Viana, «resultado de unos amores con una campesina de Felanitx, Margarita». Los nuevos datos apuntan a dos cartas: la que el príncipe envió al gobernador de Mallorca, agradeciéndole lo que había hecho por la campesina; que ahora resulta que tal carta fue enviada al gobernador de Sicilia; y otra carta, ésta en italiano, (encontrada por Verdera, como la anterior, en los archivos de la Corona de Aragón) en la que se habla de que la tal Margarita era de Sicilia. «Estos datos fueron dados a conocer en febrero por la agencia Efe, pero los mallorquines los ignoraron. Pero son pruebas definitivas para cerrar la tesis mallorquina», apuntó.