El Ayuntamiento de Formentera, a través de su alcalde Isidor
Torres, solicitó el pasado jueves al conseller de Patrimoni, Joan
Marí Tur, la protección de las 'fites' concedidas por la Corona de
España a Marc Ferrer en el siglo XVII «por ser una parte vital en
la historia de la isla, ya que marcan los primeros doblamientos en
la misma».
Torres adelantó que la puesta en valor de las 'fites', que
tienen forma de cruz cuyos brazos están orientados Sur-Norte y
Este-Oeste, puede generar una ruta turística a seguir por el
visitante de Formentera, ya que además de dar testimonio del orígen
de la isla, sus primeras administraciones y pobladores, marca el
inicio de la época moderna en la Pitiusa menor.
En concreto, un decreto oficial en 1695 inició el proceso
repoblador de la isla, que estuvo escasamente habitada en época
romana y cartaginesa. Así, la Corona hace donación a dos ibicencos,
Marc Ferrer y Toni Blanc, de una parte de la isla, que ya
anteriormente, en los siglos XV y XVI, se había tratado de poblar
sin éxito debido a la inseguridad.
La disminución de la piratería favorece el proceso repoblador de
Formentera, que durará hasta el siglo XVIII. De esta época quedan
vestigios tales como cinco torres de vigilancia y defensa. Poco a
poco fueron llegando pobladores que se instalan en nuestras
tierras. Marc Ferrer está considerado como «padre» de los
formenterense actuales. A partir de 1726 se funda el primer núcleo
estable de población, en Sant Francesc.
El pasado jueves se desplazó a Formentera el propio Marí Tur y
en esta visita se abordaron algunos temas relacionados con esta
petición de Torres al conseller de Patrimoni para que proteja las
'fites' del siglo XVII concedidas a Marc Ferrer.
Marí Tur se reunió en la visita que realizó la semana pasada a
la Pitiusa menor con el propio alcalde y con el conseller de la
isla, Pep Mayans.
El objeto de la visita a Formentera del conseller de Patrimoni,
no obstante, fue efectuar un balance y preparar junto con el
alcalde de la isla el plan de gestión del bienio 2006-07.
Una vez terminadas las reuniones, y de entre todos los temas
tratados en las mismas, Marí Tur destacó en su balance ante la
prensa los problemas legales que rodean la declaración de Bien de
Interés Cultural del antiguo campo de concentración de la isla.
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