Maria Piña expone desde ayer en la Plataforma Sociosanitaria de las Pitiüses una colección de ilustraciones tamaño A-4 de temas fantásticos, oníricos e infantiles.

La joven ilustradora fue la ganadora en 2002 del certamen Art Jove, en la categoría de cómic. Fue el primero que había dibujado y eso la animó mucho a la hora se seguir con esta vocación. Repitió en 2003 y volvió a obtener el máximo galardón.

Este año ha sido finalista del mismo concurso y en la segunda edición del «Premi de Tardor d'Eivissa i Formentera» también logró llegar a la final.

La inspiración de Maria Piña procede de relatos y cosas que ve en televisión además del trabajo de otros ilustradores, sobretodo de los británicos.

Dibuja en especial hadas pero también duendes, casitas que parecen sacadas de un sueño y bosques encantados son los principales motivos de sus láminas.

Ella misma clasifica la temática de sus ilustraciones en dos vertientes; las que se parecen un poco al «Señor de los Anillos» y las que son más como un sueño, de un tipo más serio.

Dice la ilustradora que «quería saber cuáles gustaban más y sin lugar a duda las hadas son las que tienen más éxito; pensaba que n, pero a la gente le gusta la fantasía».

Piña también ha trabajado como colaboradora en el suplemento infantil Rifi-Rafe, del diario Última Hora en la de edición Mallorca.

De momento, Maria, no tiene ningún otro proyecto pero espera volver a exponer sus láminas en un futuro no muy lejano, además, trabajar en el campo del comic de nuevo en el que se ha movido hasta hace dos años es uno de sus objetivos principales.