Fotograma de 'Mambo italiano', 'Mejor Largometraje'.

El jurado del II Festival del Mar repartió los cuatro premios del certamen en tres trabajos: las películas «Mambo italiano» (Canadá, 2003), de Émile Gaudreault; «Latter Days» (EE UU, 2004), de C. J. Cox, y el cortometraje «Getting to know you» (EE UU, 2004), de Liz Lachman . El primero se alzó con los premio al «Mejor Largometraje» y a la «Mejor Actriz», para Ginette Reno. El segundo recibió el premio al «Mejor Actor» para Wes Ramsey; y el tercero recibió el de «Mejor Cortometraje». El jurado lo formaban Vicent Monal, presidente del Colectivo Gay de Eivissa; Fernando Monge, fotógrafo y cineasta; Iván Herrerías y Ana Yakimov, de la AAVIB y Rodolfo Rubio, periodista.

El premio consistió en una placa con el anagrama del Festival Internacional de Cine Gay y Lésbico de Eivissa, dos caballitos de mar mirándose de frente, que la organización hará llegar a los ganadores, que no estuvieron presentes en la ceremonia de entrega del pasado jueves noche.

El director del Festival del Mar, Frieder Egermann, hizo ayer a este periódico un balance del encuentro, que en la segunda edición ha durado seis días, ha tenido por marco Multicines Eivissa y en el que se han proyectado siete largometrajes y 16 cortometrajes: «Creo que el resultado ha sido muy bueno; estamos avanzando poco a poco y paso a paso en la dirección que queremos ir. Los comentarios del público han sido muy positivos y las sesiones han estado casi llenas y algunas llenas. En cuanto a la selección de películas y cortos, hemos mezclado los géneros, comedia, drama, acción... de todo un poco», afirmó satisfecho.

Un resultado, pues, que permite apostar por la continuidad. «Creo que sí; si seguimos como ahora. La acogida que tiene en la isla es muy positiva, pero este tipo de eventos tiene un desarrollo lento. Ya este año, con sólo dos ediciones, ha tenido repercusión internacional en cuanto a la abundancia del material que nos ha llegado para efectuar la selección, y por los contactos que hemos tenido vía internet y llamadas», precisó Egermann, añadiendo que el futuro del certamen «dependerá también de las ayudas que podamos recibir por parte de las instituciones y la de algunos factores externos». De momento, las dos únicas instituciones que han apoyado el Festival de Cine Gay y Lésbico de Eivissa son el Consell Insular, con una partida de 6.000 euros, y el Ayuntamiento de Eivissa, con respaldo y colaboración, pero no económica.

Con un equipo reducido, que ha tenido que multiplicar sus esfuerzos para procurar que todo funcionase en condiciones, una de las opciones sería la posibilidad de recurrir a voluntarios. «De momento no hemos recurrido a esa opción, pero es una de las cosas que están en la lista para el año que viene; por ejemplo, involucrar a gente que esté próxima al sector audiovisual , para que al mismo tiempo que nos hecha una mano puedan aprender algo de la mecánica de un festival y ver trabajos alternativos al cine comercial que se proyecta habitualmente, con un nivel de calidad exigente», apuntó.

Entre los trabajos presentados en el certamen figuran estrenos en festival, como la película francesa «Un amour a taire»; estrenos en España, como la norteamericana «Slutty Summer», y estrenos en Europa, como la canadiense «Every One»; entre otros.