Una pintura valenciana de final del siglo XVII ha sido donada al
Consell Insular por una persona que quiere permanecer en el
anonimato. Según explicó ayer el portavoz de la institución, Joan
Marí Tur, «la única condición que puso es que su destino fuera la
parroquia de Sant Francesc, en ses Salines».
Para ello, la obra, que representa a San Francisco, deberá ser
previamente restaurada, lo que se hará próximamente con cargo a la
Conselleria de Patrimoni por un presupuesto que se calcula entre
dos y tres mil euros. El conseller de Patrimoni se mostró ayer «muy
satisfecho y agradecido por esta generosa donación».
Por otra parte, Marí Tur informó que ya se ha hecho realidad la
compra por parte del Consell del cuadro «Parroquia de San Antonio»,
pintado en 1903 por Juan Llaverías Llabró, por 12.000 euros más
IVA. Las dimensiones del lienzo sin marco son de 70 x 160 cms., y
aparte de su calidad artística en sí, la obra representa un
testimonio documental elocuente para el municipio de Sant Antoni;
no sólo porque refleja cómo era el interior del templo en sí, sino
porque la pintura informa sobre los atuendos y las costumbres de la
época a la hora de asistir a las ceremonias religiosa.
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