«Lo paradójico y raro es la poca atención que estas islas da a la náutica antigua»

El doctor Guerrero Ayuso inicia en «Sa Nostra» el Seminari d'Arqueologia 2005, que durará tres días

Víctor M. Guerrero Ayuso en la primera conferencia del Seminari d'Arqueologia'05, ayer en la Sala de Cultura de «Sa Nostra».Foto: MARCO TORRES

Julio Herranz20/04/05 0:00

«La idea del seminario es un poco osada: resumir en tres días lo que yo hago a lo largo de un curso en la UIB». Con estas palabras resumió ayer Víctor M. Guerrero Ayuso a este periódico el objetivo de su participación en el Seminari d'Arqueologia 2005, que organiza el Museu Arqueològic con el patrocinio de la Conselleria de Cultura del Govern y la colaboración de «Sa Nostra» y la Associació d'Amics del Museu Arqueològic. «Mantengo con el museo, y particularmente con Jordi y Benjamí una amistad de hace muchísimos años. Me propusieron estas charlas y acepté encantado, desde luego», añadió.

El curso de doctorado al que se refiere el doctor Guerrero (que imparte desde 1995) está dedicado a «Navegaciones prehistóricas y protohistóricas en el Mediterráneo»; curso que también imparte en la Universidad Luterana de Brasil, y algunos puntuales en la de Barcelona y la Complutense de Madrid; más varias intervenciones en eventos científicos relacionados con el tema en Madrid, Cádiz, Palermo, Católica y Tenerife. Además, ha publicado desde hace años un buen número de trabajos sobre náutica antiguo y arqueología marina. «Por todos los sitios a los que me llaman veo que hay un interés extraordinario por estas cuestiones; pero en estas islas parece que el tema está bastante apagado. Aparte del curso que tengo en la UIB, no hay prácticamente nada. Lo paradójico y raro en estas islas es la poca atención que se le da a la náutica antigua, frente al demasiado que le concede a la actual», precisó.

Sin embargo, la navegación ha sido un hecho histórico de primera importancia en las Islas. «En la navegación histórica Balears ha tenido siempre un papel trascendental. Ese olvido de ahora no se justifica con la importancia de los marinos baleáricos. Y no sólo en el Mediterráneo, pues fueron los primeros exploradores de Canarias. Jaume Ferrer se planta con una galera hasta Río de Oro en 1384; cartógrafos y marineros de estas islas tienen una gran presencia en todo el Mediterráneo, de oriente a occidente, incluido el Atlántico hasta las Canarias», insistió Guerrero Ayuso.