EFE|Los Angeles

El genio de la música, Ray Charles, podría apuntarse una nueva victoria después de su muerte con el cacareado Grammy que se espera reciba su álbum póstumo «Genius Loves Company». La obra, la de mayores ventas de la carrera de Charles, figura como favorita en esta 47 edición de los premios más destacados del mundo de la música.

La ceremonia de los Grammy tendrá lugar hoy en el estadio Staples de Los Angeles. El favorito al menos en número de candidaturas es Kanye West, productor discográfico metido a rapero que aspira a un total de diez premios. West se hace incluso la competencia a sí mismo, con dos candidaturas en la categoría de colaboración de rap por «Slow Jamz», con Twista y Jamie Foxx, y «All Falls Down», con Syleena Johnson. La revista «The Hollywood Reporter» le ha descrito en su quiniela de premios como «el fenómeno» del año. Aún así, West tiene difícil este año una de esas victorias sonadas que tanto le suelen gustar a la Academia de Artes y Ciencias Discográficas. A corta distancia de West, con ocho candidaturas cada uno, le siguen Alicia Keys y Usher.

La Academia ha demostrado su amor por Keys en anteriores ocasiones, ganadora de cinco premios Grammy en el 2002, e «If I Ain t Got You» tiene todas las papeletas para llevarse el premio de canción del año, según el semanario «Entertainment Weekly». Usher es el campeón comercial y con su álbum, «Confessions», ha vendido más de 8 millones de copias, cifra que le sitúa a la cabeza de las ventas y le puede ayudar en su victoria en la categoría de mejor grabación del año.

En el apartado de rock, todas las quinielas coinciden en la victoria de Green Day y su ópera punk-rock «American Idiot» mientras que la categoría de rap parece en manos de Jay-Z y su «The Black Album». La misma certeza domina en el mayor galardón de la noche, el de mejor álbum del año, con el favoritismo de Charles.