Los cuatro volúmenes (amplia- mente ilustrado con dibujos, mapas y fotogra- fias) de la obra de Francesc Xavier Hernández.

La Biblioteca Municipal de Eivissa (Can Ventosa) acogerá a las 20,30 horas la presentación de los cuatro volúmenes de la obra «Història Militar de Catalunya», de Francesc Xavier Hernández Cardona, catedrático de Didàctica de les Ciències Socials de la Universitat de Barcelona. Josep Antoni Prats, profesor de Geografía e Historia, y el eurodiputado Bernat Joan serán los encargados de glosar los méritos de esta extensa obra de carácter didáctico y divulgativo. Por su parte, el autor hablará sobre «Eivissa i la Història militar de la Corona catalano-aragonesa». Precisamente, Hernández está profesionalmente relacionado con Eivissa mediante los diversos proyectos de la museización de Dalt Vila.

Editado por Rafael Dalmau, la obra está ampliamente ilustrada con dibujos, mapas y fotografías, «y cubre el vacío que hay sobre este tema en la historia de los territorios de la antigua Corona de Aragón», según explica la editorial en una nota informativa. «No es un trabajo de exaltación de la violencia ni tampoco una proclama pacifista, sino que acerca la lectura de la guerra como fenómeno fundamental para entender la historia. Para ello utiliza argumentos científicos de todo tipo: poliorcéticos, históricos, geoestratégicos, políticos y hasta la teoría del juego aplicada a las ciencias sociales».

«Història Militar de Catalunya» recoge un amplio catálogo de episodios de la historia militar de Eivissa: los precedentes tipificados por la talasocracia púnica en el Mediterráneo oriental, ejercida principalmente desde Ebusus. Durante el periodo islámico, Madina Yebisah deviene un referente importante en el comercio y la marina andalusí. La cruzada pisana, con la participación determinante del conde de Barcelona Ramon Berenguer III contra Eivissa y Mallorca fue el primer intento de ocupación feudal de las isla, a principios del siglo XII. El asedio y la conquista catalano-aragonesa del siglo XIII (1235) bajo la dirección de Guillem de Montgrí marcó la vinculación de Eivissa a la Corona de Aragón en cuyo contexto histórico resultó un puerto geoestratégico militar y comercial.

A principios del siglo XVI la consolidación del poder turco en las costas del sur del Mediterráneo provocó un vuelco geoestratégico: Eivissa toma el primer frente de su frontera marítima. Para consolidar el área de influencia de su Corona y para contrarrestar el impacto de la piratería berberisca y de la armada turca en la zona mediterránea, Felipe II ordenó la fortificación de Dalt Vila, que bajo la dirección de Calvi y Fratin supuso una innovación de la poliorcética de entonces. Así, las murallas ibicencas se convierten en un paradigma de la arquitectura militar renacentista y un eficaz medio disuasorio respecto a los ataques turcos.