«Valencia reúne las exigencias demográficas para un museo de
esta envergadura; tiene un millón de habitantes, una gran actividad
musical y es una ciudad empeñada en tener un protagonismo cultural
importante». Con estas palabras, José Vázquez, director de la
Orpheon Foundation, resumió ayer a este periódico el por qué
preferiría que la extraordinaria colección de instrumentos antiguos
de esta fundación tuviese como sede la capital levantina. Una buena
parte de esta colección única en el mundo lleva instalada desde
hace dos meses en el Museo Diocesano de la Catedral.
Precisamente, Vázquez ha vuelto a Eivissa «para desmontar la
exposición, que aún estará abierta al público algún día más. Ha
sido todo un éxito de visitas, con centenares de alumnos de
colegios de la isla y del Conservatorio, donde también hicimos una
clase magistral de dos días, con alumnos y profesores que quieren
repetir experiencia el año que viene», apuntó ayer el propietario
de la colección, también director del Orpheon Consort, agrupación
que ha ofrecido varios conciertos en el reciente Festival Eivissa
Clàssica.
También ha mostrado interés por la colección un banquero de
Verona (Italia), «que quiere establecerla en un castillo austríaco
del siglo XIX que da sobre la ciudad»", apuntó Vázquez, quien tiene
compromisos con Mallorca y Baeza para sus exquisitos instrumentos.
«De aquí tendríamos que llevarla a Mallorca y a Baeza, lo que pasa
es que ninguno de los dos ayuntamientos ha mandado aún el contrato
con las fechas. Bueno, lo que tenemos seguro es un concierto el 17
de diciembre en la ciudad andaluza. Lo que pasa es que estando en
Eivissa sería más lógico llevarla primero a Mallorca y luego a
Baeza, donde tenemos también un proyecto que durará todo 2005 y
parte de 2006; y es que mover estos instrumentos resulta bastante
costoso», aseguró.
Una agenda apretada la de la Orpheon Foundation y el Orpheon
Consort, cuyos compromisos próximos incluye conciertos en Navarra y
Gijón, tres ciudades francesas, una yugoslava, La Habana y hasta el
famoso castillo de Duino, donde Rilke escribiera sus geniales
elegías.
Una de las ventajas que José Vázquez señaló si se instalase su
colección de instrumentos antiguos en Valencia, es la proximidad a
Eivissa y Mallorca. «Habría un proyecto para todo el año en
Valencia y podríamos tener una sucursal anual en las Islas para
trabajar con las escuelas y los músicos de aquí y de Mallorca.
Sería un planteamiento bastante interesante», precisó.
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