Homenaje a Will Faber con una retrospectiva que reúne 24 cuadros

La exposición, que se inaugura el jueves, reunirá 24 obras del reconocido pintor alemán que introdujo el arte abstracto en la isla donde pasó largas temporada. Algunas de las obras son propiedad de la galería, pero otras han sido prestadas por coleccionistas de la isla.

Faber conoció por primera vez Eivissa en 1934 y en compañía de su esposa Emma; estancia que se alargó hasta 1936, y en donde frecuentó la compañía de artistas como Wols, Hausmann, Broner. Al terminar la Guerra Civil volvió de Alemania y se instaló en Barcelona, donde desarrolla una interesante labor como diseñador gráfico.

Cuando Faber se inicia en la abstracción es un artista en plena madurez. Sus obras de los años 50 ya muestran con claridad los caminos por los que transitará su producción futura, con la geometría, los signos y los colores vivos como referencia continua. A principio de los 60 sus cuadros reflejan la influencia del informalismo matérico practicado por los pintores catalanes más punteros.

En 1974 la revista «Papeles de Son Armadans», dirigida por Camilo José Cela, le dedica un monográfico en el que críticos, amigos y artistas le rendían homenaje. En los 70 y 80 Faber trabaja en grandes proyectos; en 1981 la Fundació Joan Miró y el Instituto Alemán de Barcelona organizaron una exposición antológica.

El impacto que le causó Eivissa a Will Faber no sólo le afectó personalmente sino que dicha influencia se puede comprobar a través de su obra. Al llegar a la isla, Faber aún trabajaba en una línea realista, aunque poco después abandonó este estilo para dedicarse de lleno a la abstracción.