«Como director y máximo responsable de la investigación científica, le aseguro que no se ha revelado ningún tipo de resultado. Por tanto, todo el que saque conclusiones sobre el origen de Cristóbal Colón, no se basa en los estudios que estamos efectuando», manifestó a Ultima Hora José Antonio Lorente, director del Laboratorio de Identificación Genética del departamento de Medicina Legal de la universidad de Granada, que encabeza el equipo científico que trabaja para, con las pruebas de ADN, resolver el enigma del origen del descubridor de América.

Una de las pruebas que podrían confirmar que Colón era originario de Mallorca sería que el ADN del Príncipe de Viana coincidiera con el de los huesos exhumados en Sevilla. Sobre esto Nito Verdera asegura que desde 1994 se tiene el ADN de los restos del de Viana, analizados en Poblet. «Es cierto, disponemos del ADN que se efectuó en los restos hallados en Poblet para establecer la relación madre hijo con los de Blanca de Navarra. La secuencia del ADN mitocondrial (el ADN que se transmite de madres a hijos), dio resultados negativos».

El científico sale al paso de las opiniones, entre estas la del ibicenco Nito Verdera, que en un artículo publicado en este diario negaba la mallorquinidad de Colón, tomando unas declaraciones del profesor Marcial Castro, integrante del equipo investigador. «Las declaraciones de Marcial Castro son deducciones personales que se basan en los conocimientos propios, pero no en base a nuestro trabajo. La investigación se hace para que dejen de producirse esas discusiones áridas sobre el origen de Colón. Por ese motivo, la investigación es lenta por lo rigurosa. No se puede descartar ninguna teoría ni afirmar nada hasta que no se dispongan de todos los datos, porque pueden aparecer muchas sorpresas».

Hace referencia a las diversos informes antropológicos que han ido apareciendo periódicamente «pero que no son válidos porque les ha faltado información. Por nuestra parte, los resultados que vamos obteniendo los tenemos protegidos bajo cuatro llaves hasta que dispongamos de los resultados absolutos». En este sentido, los restos exhumados en Sevilla en junio del 2003 están siendo analizados en tiempo récord por cuatro laboratorios de Italia, Estados Unidos, dos de España, además de lo que hacen en Granada.

Lorente anunció que «existe un proyecto de convenio entre el Consell de Mallorca y la Universidad de Granada, el cual nos podrá permitir desarrollar las técnicas necesarias para establecer esa relación de padre a hijo, que en este caso es lo que interesa a la ciencia, y así tener la posibilidad de descartar o demostrarlo definitivamente; y este es el atractivo de la teoría mallorquinista».