El Ayuntamiento de Eivissa pondrá en marcha estos días el proyecto
de la segunda fase de la museización de Dalt Vila. El paso previo
será encargar un estudio, que se centrará en potenciar el
conocimiento y uso de las casamatas de los baluartes de Sant Pere,
Sant Jordi y Sant Jaume. «Se encargará a los mismos profesores e
investigadores de la Universidad de Barcelona que hicieron el
proyecto de la primera fase. Es a través de una fundación si ánimo
de lucro que se dedica a hacer este tipo de investigaciones»,
explicó a este periódico la concejala de Cultura, Lurdes Costa.
La decisión de abordar esta segunda fase se tomó hace unos días
en la última junta del Consorcio Eivissa Patrimonio. «La primera ha
tenido muy buena acogida y todo el mundo nos felicita por ello. En
sólo 15 días de mayo pasaron por el centro de información de la
Casa de la Curia 2.500 personas; por eso pensamos que sería
interesante ampliarlo». El estudio del proyecto costará 11.650
euros. En cuanto a la primera fase de la museización, que aún no se
ha desarrollado del todo, su presupuesto fue de 600.000 euros.
«Falta, entre otras cosas, la rehabilitación de la Casa de la
Curia, que albergará el Centro de Interpretación de Dalt Vila»,
precisó Lurdes Costa.
El nuevo estudio incluirá «la conceptualización de este espacio»
y abrirá nuevas posibilidades: «Sobre todo, les pediremos que nos
hagan propuestas para las casamatas de los baluartes de Sant Pere,
Sant Jaume y Sant Jordi. Queremos recuperarlos, darles un uso y que
se entienda el por qué de su existencia. Así se ampliará el espacio
museístico y se podrá mejor comprender el monumento y se explicará
mejor la historia de un recinto que ha merecido la declaración de
Patrimonio de la Humanidad». El plazo previsto para la realización
del estudio es de cinco meses.
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