«Unamuno y Europa. Nuevos ensayos y viejos textos» es el título del nuevo volumen que Pedro Ribas dedica al escritor vasco, de quien hizo su tesis doctoral. La obra ha aparecido recientemente en la editorial Cuaderno Gris, coincidiendo con la salida en Los Clásicos Alfaguara de la vigésima edición de su traducción de «Crítica de la razón pura», obra capital de Immanuel Kant, un grueso volumen de 690 páginas. Además, el traductor y catedrático en la Universidad Autónoma de Madrid continúa siendo el secretario de la Revista de Hispanismo Filosófico, cuyo número 7, correspondiente a 2002, acaba de aparecer.

El nuevo ensayo de Ribas sobre Unamuno reúne trabajos de distintos especialistas en el autor de «Niebla», sobre temas tan dispares como su relación con los escritores sicilianos, la recepción de Unamuno en lengua inglesa, su destierro en París, la faceta de su internacionalismo a través de sus corresponsales alemanes, su concepción de la verdad o su estilo literario. Además, un apéndice firmado por Antonio de Pildain sobre «Don Miguel de Unamuno, hereje máximo y maestro de herejías (Carta Pastoral)», y una entrevista al rector de la Universidad de Salamanca sobre «La España de los vencedores», firmada por Carlos París, director de la tesis de Ribas.«Puede ayudar a situar la obra de Unamuno en el ambiente intelectual de la España de Franco y para observar el estímulo que esa obra provocó en momentos en los que Unamuno era figura mal vista por una iglesia católica que, con la victoria de Franco, reinaba de forma inquisitorial en la vida civil española», apunta en el prólogo.

En cuanto a su traducción de la obra de Kant, realizada en 1977, Ribas explica en la Introducción que «he partido del principio de que en una buena traducción, el lector no debe notar que está leyendo la versión de un texto escrito en otra lengua. Naturalmente, en el caso en que nos encontramos, es decir en la traducción de la Crítica de la razón pura, este principio es irrealizable; en primer lugar, por el grado de abstracción en que se mueve el discurso kantiano; en segundo lugar, por la distancia histórica de la obra (...)