La reconversión de la feria Art.Ibiza en una cita bianual a partir de 2003 ha cristalizado este año en una exhibición de propuestas de lo que se ha venido en llamar el 'arte emergente', una serie de obras que, de hecho, no tienen una salida natural hacia otros espacios que no sean las ferias de arte. Tras dos días de exhibición en el recinto ferial, los organizadores de la muestra se mostraban ayer «muy satisfechos y sorprendidos» por la aceptación que ha tenido la iniciativa entre el público ibicenco.

Rosa Hispán, directora de Art.Ibiza 2002, comentó ayer a este periódico la buena impresión que se llevaron los visitantes a la feria, quienes acudieron mayoritariamente a contemplarla el domingo. «El sábado nos asustamos un poco debido a la poca afluencia de público, pero se compensó el domingo, cuando hubo gente durante todo el día».

Asimismo, Hispán mencionó la satisfacción de los propios artistas participantes, entre los que se encontraban Lourdes Romaguera, Rafael Alcántara, Cristina Ereñú, Grupo Prólogo, Gary Cook, Lula Martins, Arturo Miranda, Pedro Hormigo, Tito Fernández y Antonia Maxwell. La directora de Art.Ibiza 2002 remarcó igualmente el «espíritu de participación de los aficionados al arte que se acercaron al recinto ferial». «Este era un proyecto en el que no sabíamos qué iba a pasar -añadió Hispán- y una vez cerrado Art.Ibiza 2002 creo que se han cumplido los objetivos previstos».