El Jurado premió por unanimidad la decimosexta película de Ken
Loach, donde retrata la dura realidad de unos adolescentes sin
mejor futuro que trapichear con droga, en el caso de Liam para
ayudar a su madre, una ex yonqui encarcelada, y a su hermana, madre
soltera. «Sweet sixteen» es la cuarta producción en la que trabaja
con el guionista Paul Laverty, quien visitó reformatorios y casas
de acogida para ambientar la película ganadora. Barry Ackroyd, que
también colaboró con Loach en este filme, obtuvo el Premio de
Fotografía.
La Espiga de Plata recayó en el director chino Zhang Yimou,
autor de «Sorgo rojo» (1987) y «La linterna roja» (1991), donde
conjuga ternura, esperanza, optimismo y buen humor en la historia
de un jubilado que perdidamente enamorado hace todo lo imposible
por casarse con la mujer objeto de su deseo. La protagonista, Dong
Jie, fue distinguida con el Premio a la Mejor Actriz, ex-aequo con
Adriana Ozores, por su papel principal en «La vida de nadie», ópera
prima de Eduard Cortés, donde encarna a una mujer feliz y
hacendosa, víctima con el paso de los años de las mentiras de su
marido.
Compartido fue también el reconocimiento al mejor actor, en este
caso por los argentinos Héctor Alterio, Federico Luppi y José
Soriano, los entrañables y gruñones ferroviarios jubilados de «El
último tren», de Diego Arsuaga.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.