OSCAR PEYROU - CANNES
Al premiar ayer noche la película sobre el Holocausto «The pianist», del francés Roman Polanski con la Palma de Oro, la 55 edición del Festival Internacional de Cine de Cannes hizo un ejercicio de corrección política, ya que al mismo tiempo distinguió con el Premio del Jurado a la palestina «Yadon Ilaheyya», de Elía Suleiman. Sin embargo, el vencedor de la noche fue el finlandés Aki Kaurismaki que se llevó dos importantes galardones, el Gran Premio y el de Mejor Actriz para la protagonista de su filme «Mies vailla menneisyytta», Kati Outinen.

La película de Polanski cuenta la historia de un pianista judío polaco que es apresado por los nazis tras la invasión de su país por las tropas del III Reich. El filme se basa en la verdadera historia del músico Vladyslaw Szpilman, que pudo sobrevivir al Holocausto gracias a la ayuda de un oficial alemán.

Polanski dijo tras la proyección que sabía que un día haría una cinta sobre ese doloroso período de la historia de Polonia, pero que no deseaba que fuera autobiográfico. Polanski nació en Francia en 1933 pero creció en Polonia, de donde eran sus padres. Sus estudios cinematográficos los hizo en la Escuela Nacional de Cine de Lodz. «Tras leer los primeros capítulos de la autobiografía de Szpilman, supe que 'The pianist' sería el asunto de mi próximo filme. Yo sobreviví al bombardeo de Varsovia y al ghetto de Cracovia y deseaba recrear los recuerdos de mi infancia pero sin llegar a involucrarme personalmente». «Lo que más me impresionó de los recuerdos del músico fue la sorprendente objetividad con que presenta la realidad de la época, objetividad que limita con la frialdad. En su libro aparecen buenos y malos polacos, buenos y malos judíos y buenos y malos alemanes».

El premio al Mejor Actor para Olivier Gourmet, protagonista de la película belga «Le fils», de los hermanos Dardenne, también fue considerado justo, ya que interpreta el extremadamente difícil papel de un hombre que oscila entre la compasión y la venganza.