Un grupo de aficionados al cine, antes de entrar en la sala donde ayer se inauguró el festival de cortometrajes de Eivissa. Foto: MARGA FERRER

La tercera edición del Festival Internacional de Cortometrajes de Eivissa, Elektrozine'01, comenzó anoche en Can Ventosa con la proyección de los diez trabajos que participan en el apartado «Panorama balear». El director del certamen, Fernando Monge, abrió la velada explicando el programa de este año e informando sobre las modificaciones de última hora, como el aumento de los cortos de la sección balear, «porque algunos se han enterado tarde y nos han pedido a última hora si podían participar». Por tal motivo, la sesión de anoche se extendió algo más de lo previsto.

Can Ventosa será de nuevo hoy el marco en el que se proyectarán a partir de las ocho y media los trece cortos que participan en la sección oficial con el formato 16 mm. y vídeo. El resto de los trabajos (en 35 mm.) se verán a la misma hora del jueves y el viernes en los Multicines Eivissa.

Mostrándose más satisfecho que de las dos anteriores ediciones por el alto nivel del material recibido, Monge explicó que «esta vez ha sido más fácil llevar la organización, no ha sido tan caótico como otros años, porque ya somos un poco veteranos en el tema». Sin embargo, reconoció que Elektrozine tenía aún alguna carencia notable; la principal, «una infraestructura estable; básicamente, una oficina permanente, que podría estar cubierta por una persona, para mantener contactos con otros festivales, echar a andar la gestión de la subvención europea, que active la posibilidad de ir a otros certámenes para tener opción de escoger el material y hablar con los realizadores, definir una línea del festival...».