Lo intempestivo de la hora (cuatro de la tarde), fue uno de los factores que llamó ayer la atención de la inauguración de la primera exposición que Michael Fischer realiza en Eivissa. El espacio elegido es el centro cultural de Sa Punta des Molí en Sant Antoni, donde este reconocido artista alemán ha colocado sus cuadros y esculturas coloristas y alegres, una obra que permanecerá expuesta hasta el próximo día 20.

Nacido en Leipzig, Fischer es conocido sobre todo por su arte global constructivo y su personal visión cómica reflejada en voluminosos acrílicos y óleos. Entre sus creaciones destacan también las obras monumentales de gran formato, ocupando la mayor de ellas tres mil metros cuadrados en su ciudad natal. Recientemente ha terminado una de sus obras más celebradas, una fuente con relojes vía satélite y otras figuras de agua, de 2'4 toneladas de peso y casi 7 metros de altura.

La exposición que presenta en Sant Antonio lleva por título «Las noches en el bar Berlín de París». Algunos de los trabajos mostrados proceden de este local, un punto de encuentro para artistas con ganas de vivir la noche y debatir sobre sus intereses. Durante el tiempo que dure la muestra, tendrán lugar varios encuentros de distintos colectivos en este centro cultural.