Fanny Tur, presidenta de la Comisión de Patrimonio. Foto: VICENÇ FENOLLOSA

La Conselleria de Cultura en colaboración con el Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN) participan en la creación de un taller de trabajo infantil en la zona de ses Païses de Cala d'Hort. El curso, de 15 días de duración, «acogerá a 20 chicos que restaurarán muros de paret seca de la zona, así como un aljub, para que vuelva a correr agua por allí», según explicó ayer a este periódico Fanny Tur, consellera de Cultura del Consell Insular. Los participantes en este taller residirán en el centro de ses Païses, propiedad del Consell.

Otro punto aprobado ayer por la Comisión de Patrimonio fue la construcción de un pequeño muro de contención que proteja el progresivo deterioro del acueducto romano de s'Argamasa, «que como llega hasta el mar, lo van erosionando las olas», apuntó Tur. «En abril del pasado año tratamos el tema en la Comisión y encargamos a un arquitecto que hiciera un proyecto de un pequeño dique que frenara el deterioro». «Enviaremos el proyecto que hemos aprobado al Ayuntamiento de Santa Eulària y a Costas para que den el visto bueno y enseguida comenzarán las obras, que costarán sólo un millón de pesetas».

La institución que vela por el patrimonio de las Pitiüses aprobó asimismo el proyecto de reforma de la torre de Can Curt, casa payesa de Sant Agustí que albergará la futura sede social de los mayores de esta localidad del municipio de Sant Antoni. «En la anterior sesión ya aprobamos el proyecto de la casa, y una vez que se han cambiado algunos materiales previstos, que no eran los correctos para una construcción tradicional como esta, se ha dado vía libre a la realización de la obra». La restauración de la casa payesa de Can Curt y la torre anexa estará financiada en un 65 por ciento del total por la Conselleria de Obres Publiques del Govern balear.

Otro punto aprobado en la sesión de ayer fueron las obras de la rotonda de Sant Rafel, una vez que se han modificado algunos aspectos del proyecto inicial, rechazado en principio por la Comisión, ya que dicha rotonda entraba dentro del área de los 250 metros de la iglesia (perímetro de protección de todas las iglesias rurales de las Pitiüses, según la Ley de Patrimonio), afectaba a una paret seca tradicional y al Pou de Ferrer, declarado recientemente Bé Catalogat por la Comisión de Patrimonio del Consell. «La Dirección General de Carreteras nos ha enviado modificado el proyecto inicial, lo que nos congratula porque de esta forma se preserva un bien patrimonial ya catalogado», expresó la presidenta de la Comisión de Patrimonio.