Una fotografía de una niña de Nepal, que la impactó emocionalmente, es el punto de partida de la serie «Gentes del Mundo», que Carmen Gómez Valverde presentó ayer en la galería «Marta Torres», después de haberla paseado durante cinco por varias ciudades y países. En su primera muestra en la isla, la artista catalana ha reunido 15 óleos sobre lienzo dentro de la estética del retrato naturalista. «Mi intención es acercar al espectador la cultura de otros mundos menos favorecidos que el nuestro», explicó Valverde a este periódico.

Con una intención de alertar la conciencia a través del impacto de las imágenes, la artista trabaja mayormente sobre fotografías, aunque a veces también capta la impresión in situ. «Lo que intento reflejar es vida, que los cuadros estén vivos», apuntó Valverde, quien se mostró complacida de la provocación que pudiera causar una exposición de esta naturaleza en pleno verano ibicenco, mayormente frívolo. «Me gusta provocar; es un poco lo que pretendo, que la gente no se quede impasible ante estos cuadros, sino que se los lleve en la mirada, como un toque a la conciencia».

Aunque Valverde reconoció que con anterioridad a esta serie de «Gente del Mundo» había hecho paisajes y bodegones, «desde que vi la fotografía de esa niña de Nepal no sé pintar otra cosa; y eso que no es un trabajo comercial, amable, pero es que quiero transmitir a la gente un mensaje para que todos nos comprometamos con los marginados del mundo, con los desheredados de la sociedad», concluyó.