Una vez más, Víctor y Ana no quisieron arriesgar y subieron por
primera vez el telón de su nuevo espectáculo, diseñado por José
Carlos Plaza, en un recinto donde ya cosecharon grandes éxitos, y
donde un público fiel, que abarrotó el recinto, está entregado de
antemano. De hecho, en el Palacio de Deportes de Gijón vio la luz
su anterior espectáculo, «Mucho más que dos», donde la pareja de
cantautores actuó junto a nombres como los de Pedro Guerra, Antonio
Flores o Miguel Ríos, y fue también el lugar elegido para el inicio
de su trabajo precedente «El gusto es nuestro».
Con 80.000 vatios de sonido y dos grandes pantallas a ambos
lados del escenario donde se fueron proyectando imágenes de
carretera, Víctor y Ana hicieron sonar sus nuevas canciones y sus
éxitos más conocidos en un espectáculo que se prolongó durante más
de tres horas. «Sólo le pido a Dios», «La puerta de Alcalá», «El
abuelo Víctor», «Contamíname», «Nada sabe tan dulce como tu boca»,
o «Sólo pienso en ti», se sucedieron a un concierto, cuya primera
parte, estuvo marcada por las canciones nuevas de sus respectivos
discos, lo que dificultó en un primer momento que la gente se
entusiasmara.
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