Cada año, en España se diagnostican unos 4.000 nuevos celíacos. Según la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE), se estima que un 1% de la población en nuestro país es celíaca pero la mayoría de las personas afectadas, hasta un 75%, no lo sabe. El infra diagnóstico es uno de los principales problemas que plantea esta enfermedad, cuyo único tratamiento es una alimentación libre de gluten.

Tras un buen diagnóstico, los avances en el tratamiento han sido relevantes ya que, durante los últimos 20 años, las opciones alimenticias de los celíacos han mejorado en cuanto a variedad y diversidad de productos, calidad y asequibilidad de la oferta. Este hito se ha conseguido gracias a compañías que se han comprometido en encontrar soluciones alimentarias que mejoren la calidad de vida del colectivo celíaco, creando variedades libres de gluten que permitieran igualar la calidad, la textura y el sabor de los productos, asegurando una alimentación equiparable a una persona no celíaca.

Grupo Gallo trabaja desde hace casi una década en poner al alcance de colectivos con necesidades alimenticias especiales una amplia variedad de productos libres de gluten. Empezando por las variedades de pasta, elaboradas en la que fue la primera planta de producción exclusiva de productos sin gluten en España, en el año 2014, a las que se han unido de forma progresiva las salsas aptas para celíacos, la pasta de legumbre y las variedades de caldo natural sin gluten.

Con motivo del Día Mundial de la Celiaquía que se celebra este 16 de mayo, Grupo Gallo, quiere reafirmar su apuesta «por la democratización del consumo de productos sin gluten. Una apuesta que se ve reflejada en una estrategia que tiene como centro la innovación y el desarrollo constante de productos que se adapten las necesidades de los consumidores celíacos».

En este sentido, desde Grupo Gallo reafirman su apuesta y su compromiso por la calidad en toda la cadena de valor «desde una materia prima seleccionada meticulosamente en el campo, pasando por un proceso de desarrollo innovador para elaborar una pasta de calidad cinco estrellas», explica Montse Santafé, Marketing Manager de Healthy Food de la compañía.

Junto a la calidad, Santafé añade la variedad: «En innovación, es cada vez mayor la preocupación por buscar productos aptos para un consumidor celiaco, como nuestra pasta de legumbres, una pasta que cubre las necesidades nutricionales porque contiene el mayor porcentaje de proteína vegetal», concluye.

La gama de productos sin gluten de Gallo va más allá del conocido pack azul, con la implementación de una estrategia de innovación transversal enfocada en el desarrollo de productos de más calidad y aptos para los consumidores celíacos en todas sus categorías (harina, pan rallado, salsas, pasta de legumbres y caldos). Cada año se diagnostican miles de nuevos casos entre la población española, pero la respuesta de compañías como Gallo ha sido firme, democratizando el consumo de alimentos sin gluten de calidad, permitiendo que en la actualidad una persona celíaca tenga la misma calidad alimentaria que una persona sin esta condición.

Los expertos tienen claro que el contexto alimentario ha evolucionado de forma natural y ha cambiado radicalmente durante los últimos años. Así lo considera el Chef Estrella Michelín y embajador de Grupo Gallo, Pepe Rodríguez, quien asegura que «los celíacos toman hoy el mismo menú que cualquier otra persona porque hemos ido adaptándolo de forma natural, sabiendo que tenemos herramientas y alternativas que nos pueden ayudar a cambiar lo justo en una receta, pero con el mismo gusto, la misma calidad y el mismo ingrediente prácticamente».

PRODUCTOS ASEQUIBLES Y DE CALIDAD

Durante los últimos años, Grupo Gallo ha querido visualizar el compromiso de la marca con este colectivo y acompañarlo en todas aquellas reivindicaciones en las que ha podido apoyarles. Las condiciones de vida de los celíacos han mejorado ostensiblemente gracias al avance en diversos frentes, y cada vez es más estrecha la brecha que separa las personas celíacas de una alimentación equiparable a la de las personas que no tengan ninguna restricción.

Los avances son evidentes, pero aún quedan asignaturas pendientes y margen de mejora en diferentes aspectos: Una persona celíaca sigue estando penalizada a nivel alimentario porque, a pesar del esfuerzo de compañías como Gallo en la democratización de los productos Sin Gluten con precios asequibles, los celíacos gastan 860 euros más al año en la cesta de la compra. Por ello, este año la FACE centra sus esfuerzos en reivindicar la necesidad de una línea de ayudas para atenuar esta discriminación, que se ha visto agravada con la inflación global de los precios.

Álvaro Manzanos, vicepresidente de FACE, agradece la iniciativa de compañías como Grupo Gallo para democratizar el consumo de los productos sin gluten con precios asequibles: «Para la FACE es muy importante el trabajo de empresas como Pastas Gallo para que los celíacos dispongan de alimentos variados, de alto aporte nutricional y también a un precio asequible. De este modo, conseguimos que nuestro colectivo disponga de muchas opciones para llevar a cabo una dieta segura, equilibrada y saludable».