Parlament de les Illes Balears durante una sesión de control. | Europa Press - Isaac Buj

El PP negocia con los partidos de izquierda una solución para salvar el decreto de simplificación administrativa y la consecuencia directa será que no se derogue la ley de memoria democrática en el pleno que se celebra este martes por la mañana en el Parlament balear. Según ha avanzado Última Hora, dirigentes del PP mantuvieron ayer contactos con la oposición para cerrar esta solución in extremis. Si el PP se abstiene, la ley no sale adelante.

La ley de memoria democrática seguirá en vigor a cambio de una abstención de la izquierda en el momento en el que se tenga que revisar el decreto de simplificación administrativa y corregir las enmiendas de Vox que el PP votó por error. También este martes se celebra una decisiva reunión sobre los Presupuestos. El PP da por hecho que habrá que prorrogarlos y que habrá que seguir negociando.

Los Presupuestos

Fuentes de la formación han indicado este lunes a Europa Press que el sentido del voto 'popular' a la proposición de derogación se decidirá en función de lo que pase en las próximas horas, en relación al bloqueo en las negociaciones con los de Santiago Abascal para aprobar los Presupuestos autonómicos y la crisis abierta entre los socios de investidura por la aprobación por error de un paquete de enmiendas en el decreto de simplificación administrativa.

Ante la incógnita de qué votarán finalmente los 'populares', la portavoz parlamentaria de Vox, Manuela Cañadas, ha dejado claro que «si votan que no a derogar la norma, como hicieron en Castilla y León, serán los del PP quienes tendrán que explicarlo», porque «Vox será fiel a su ideario, a su proyecto y a sus votantes», ha añadido.

De hecho, ante la circunstancia de que varios alcaldes del PP hayan planteado a la presidenta del Govern y líder de la formación en las Islas la posibilidad de que convoque elecciones anticipadas tras la crisis abierta con Vox, Cañadas ha asegurado que están «dispuestos a ir elecciones, no hay ningún problema» porque «no tienen miedo a nada ni a nadie» y «están preparados para una posible campaña».

No obstante, en relación a las negociaciones de los presupuestos, Vox se ha mostrado abierto a «sentarse» cuando el PP quiera «para dialogar y luchar por los intereses, los derechos y las libertades de todos los ciudadanos», pese a considerar Cañadas, que al PP «parece que la OCB y los lobbies catalanistas le dictan la agenda».

Manuela Cañadas, de Vox, dijo que seguirán negociando con el PP. Pero mostró su disgusto por el hecho de los ‘populares’ busquen el apoyo de la izquierda.

«Hacen comedia y siguen a la izquierda. Si votan que no a derogar [la ley de memoria] como hicieron en Castilla y León, serán los del PP quienes tendrán que explicarlo», dijo.