El paro en Baleares cae un 18,2% en septiembre

El paro en Baleares cae un 18,2% en septiembre, dos puntos y medio más que en agosto, en un descenso muy superior al de la media nacional del 7,5%. La cifra total de parados en las islas se sitúa en 30.154 ciudadanos. Son 6.700 personas desempleadas menos que hace un año. Este último mes de verano se firmaron 31.255 nuevos contratos que mantiene la dinámica negativa iniciada hace un año, bajando un 11,7%, menos que en el conjunto del país donde la caída es del 16,2%.

Carmen Planas, presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), destaca que se prolongue «la buena dinámica de la temporada turística», si bien se muestra preocupada por la subida de la inflación, que alcanza cifras del 3,5% en España. Las islas lideran la reducción del paro y continúan registraron descensos en el número de personas desempleadas. La bajada del paro la lidera el sector primario, con un descenso del 31,8% respecto a hace un año. En el sector servicios, la caída es del 19,9%.

Los últimos datos indican que la afiliación a la Seguridad Social se incrementa un 4,3% en Baleares, que vuelve a situarse como la comunidad autónoma que más crece frente al 2,7% de media nacional. El número de trabajadores en las islas aumenta hasta alcanzar las 616.789 personas. La presidenta de la CAEB incide en la importancia de que se «mantenga la buena dinámica laboral pasados ya los meses más importantes del verano», especialmente en una época marcada por «la subida de los tipos de interés, la incertidumbre política en España y la desaceleración económica que se está produciendo en la zona euro».

«Esperamos que la temporada se alargue hasta pasado el mes de noviembre como ya ocurrió el año pasado», explica Planas. Desde la patronal se muestran optimistas con la «buena dinámica turística» de Baleares que «lidera la bajada del paro en toda España». Sin embargo, la presidenta de la CAEB insiste en la preocupación que tienen por «la alta subida de los tipos de interés, la incertidumbre política y la desaceleración económica de la Eurozona».