Balears encabeza la lista de comunidades y ciudades autónomas más inflacionistas, solo por detrás de Melilla, donde los precios crecieron un 1,4% en 2017, según el Índice de Precios al Consumo con base en 2016. En las Islas Baleares el porcentaje fue del 1,3%, por debajo del 1,6% registrado en 2016, pero aun así por encima de la media nacional, del 1,1%. Las regiones menos inflacionistas fueron Murcia, Navarra, La Rioja y Ceuta, con un 0,6%.
La utilidad del Índice de Precios al Consumo es la gran cantidad de datos desagregados que ofrece. La referencia es el mes de diciembre ya que se utiliza para el cálculo del incremento de los salarios y otras rentas, como alquileres o pensiones de alimentos, entre otros. Tiene como objetivo medir la evolución del nivel de precios de los bienes y servicios de consumo adquiridos por los hogares residentes en España, es decir, estudia las subidas de precios o inflación. Se elabora a partir del estudio de los precios de la cesta de la compra, compuesta por 479 artículos que se consideran representativos del consumo habitual de los hogares españoles. Los precios se recogen en aproximadamente 33.000 establecimientos distribuidos en 177 municipios.
Cada grupo de productos tiene una ponderación determinada en el índice: lo que más pesa son los alimentos y bebidas no alcohólicas (19,77%), seguido del transporte (14,67%), la vivienda (13,30%), hoteles, cafés y restaurantes (12,12%), ocio y cultura (8,52%), otros bienes y servicios (6,73%), vestido y calzado (6,73%), menaje (5,88%), medicinas (3,96%), comunicaciones (3,40%), bebidas alcohólicas y tabaco (3,02%), y enseñanza (1,68%).
Por grupos COICOP
Existen varias categorías de desagregación de los precios, los principales son por rúbricas y por grupos COICOP, unas siglas en inglés que se refieren a la clasificación del consumo según su finalidad. Según los datos aportados por el Institut Balear d’Estadística (Ibestat) por grupos COICOP, los precios de restaurantes y hoteles son los que más se han incrementado en el último año, tanto en Balears como en el ámbito estatal. Así, los precios en este sector subieron en diciembre un 2,7% en las Islas Baleares y un 1,9% en España. El año anterior los precios de restaurantes y hoteles subieron un 1,7% en el archipiélago balear y un 1,4% en toda España. Por lo tanto, el aumento registrado en 2017, en ambos casos, se trata del incremento más importante desde el año 2008, ya que estos precios experimentaron una importante contención durante los años de crisis.
El segundo grupo que más ha visto incrementar sus precios en Balears ha sido el de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, que ha subido un 1,9% (el año anterior subió un 1%). En España los precios de estos productos suben de media un 1,3%, debido a que el incremento de los precios de la electricidad en 2017 es menor que el registrado en 2016. También influye, aunque en menor medida, la bajada de los precios del gasóleo para calefacción, frente al aumento de 2016. La evolución de estos precios está claramente al alza en Baleares. En los años de la crisis, el grupo que engloba la vivienda protagonizó un descenso de precio después de ejercicios con importantes crecimientos. Así, en 2012 crecía un 5,3% y al año siguiente cae a números negativos (-0,2% en 2013), tendencia que se mantiene durante dos años más (-0,1% en 2014 y -1,4% en 2015), hasta que en 2016 los precios vuelven a subir. La evolución de este grupo en el ámbito nacional es similar, pero más moderado.
El grupo de otros bienes y servicios es el tercero más inflacionista en Balears, con un crecimiento del 1,8%, frente al 0,7 nacional. Incluye productos y servicios de atención personal, protección social, seguros, comisiones y tarifas financieras y tasas administrativas.
Por otra parte, el transporte, que fue el grupo que más subió sus precios en 2016, un 4,4%, se modera en este ejercicio, aunque sube un 1,6%. Esto se debe a que los precios de los carburantes subieron menos que en 2016. En España, los precios del transporte suben un 1,9%, cuando el aumento fue del 4,7% un año antes.
El ocio y la cultura es el único grupo en Balears cuyos precios bajan en 2017. Descienden un 0,8%, más que la media nacional, con un retroceso en los precios del 0,6%. En 2016 también bajó un 0,7% en Balears. Vestido y calzado solo sube un 0,2%, cuando el año pasado lo hizo un 1%, mientras que los precios de sanidad suben un 0,3%, dos décimas menos que en 2016.
La cesta de la compra
Si analizamos la inflación anual por rúbricas, el mayor incremento de los precios con mucha diferencia se da en los aceites y grasas, que suben un 8,1% en Balears, cuando en 2016 bajaron un 1,9. El imporante aumento, sobre todo en el aceite de oliva, se debe a la reducción de la oferta, ya que ha habido una cosecha ligeramente inferior en España y, sobre todo, una recolección pésima en el resto de países productores, como Italia, Grecia y Túnez. La ecuación es clara: a menos oferta, más precio.
La evolución de la inflación anual del precio de aceite y grasas desde 2008 a 2017 pone de manifiesto que el de este año no ha sido, ni mucho menos, el aumento más significativo de precio: en 2015 subió un 18,6% y en 2012 un 14,2%.
El segundo mayor aumento del año fue el del pescado fresco y congelado, que sube un 5,1%, menos que en 2016 cuando su precio subió un 6,5. El tercer producto más inflacionista ha sido el de crustáceos, moluscos y preparados de pescado, con un incremento del 3,9%, igual que el pasado 2016.
En definitiva, se puede afirmar que la cesta de la compra era más cara en 2017 que un año antes, ya que la inmensa mayoría de productos suben de precio. De hecho, solo bajan la carne de ovino (-2,7%), las frutas frescas (-1,3%), los cereales y sus derivados (-0,7%), la leche (-0,6%), además de las patatas y sus preparados (-0,4%).
Otras rúbricas a destacar son la vivienda en alquiler, cuyo precio sube un 1,8%. Además, los servicios del hogar suben un 3,7%.
En el apartado de descensos de precio encontramos los objetos recreativos (-3,1%), cuyo precio no ha dejado de bajar en los últimos 10 años. Los textiles y accesorios para el hogar experimentaron también un retroceso en 2017 (-1,9%), al tiempo que los electrodomésticos y las reparaciones también bajaban (-1,4%).
Inflación subyacente
La inflación subyacente no tiene en cuenta los alimentos no elaborados (procesados) ni la energía. Al excluir las partidas más volátiles, refleja con mayor precisión la tendencia del nivel de precios. Se sitúa en Balears en el 1,1%, mientras que la media nacional es del 0,8%. La inflación subyacente en las Islas Baleares marcó mínimo en 2009, con el 0,1%, y máximo en 2012, con el 2,3%.