Rodrigo, con el galardón. | Sarah Meyssonnier

Cuando Rodrigo Hernández fichó por el Manchester City en el verano de 2019, no fueron pocos los atléticos que acudieron a las redes de su club para alegrarse de una venta que dejaba 70 millones en sus arcas y que les libraba de «Rodrizontal», como le calificaron por entonces.

La llegada de Rodri a Mánchester, primero como aprendiz de Fernandinho y más tarde como sustituto y mejora del brasileño, ha sido uno de los grandes aciertos de la dirección del Manchester City, con Pep Guardiola y Txiki Begiristain en lo deportivo y Ferrán Soriano en lo económico, y este Balón de Oro es el reconocimiento supremo al mejor centrocampista del mundo.

En las dos últimas temporadas, Rodri ha ganado todo lo ganable. En la 2022/2023 se coronó con la Champions League, anotando el tanto de la victoria en la final contra el Inter de Milán, además de llevarse la Premier League y la FA Cup, en lo que supuso el segundo triplete de la historia del fútbol inglés, mientras que en la 2023/2024, la que computa para el premio francés, volvió a triunfar en la Premier, la cuarta consecutiva para él, y aunque no completó otro triplete con las derrotas en la Champions y la FA Cup, redondeó el verano con la Eurocopa.

«Es irreemplazable», ha dicho siempre Guardiola de su mediocentro, al que ha considerado fundamental para los éxitos en los últimos cinco años. Y no era solo una percepción del de Sampedor, las estadísticas así los respaldan.

Rodri estuvo 74 partidos sin perder entre todas las competiciones, desde el cinco de febrero de 2023 hasta la derrota contra el Manchester United en la final de la FA Cup el 25 de mayo de 2024. Curiosamente, las tres únicas derrotas ligueras del City la pasada temporada llegaron en partidos que el español se perdió por sanción.

Desde su fichaje, el City ha jugado 174 partidos de Premier con Rodri y 21 sin él y el ratio e derrotas se triplica cuando el centrocampista ha causado baja.

Con Rodri, el City ha ganado 129 partidos, empatado 26 y perdido 19, mientras que sin él, ha ganado 13, empatado 1 y perdido siete. El ratio de victorias con él es de 74,1 % y sin él, del 61,9 %, en tanto que el ratio de derrotas es del 10,9 % con él y sin él se eleva hasta el 33,3 %.

Además, el City ha marcado menos goles sin él (1,3 por partido por 1,7 con él) y ha cosechado menos puntos, (2,37 con él y 1,9 sin él).

A Rodri ya le escamotearon el premio «The Best» la temporada pasada, en el que no estuvo ni entre los tres principales candidatos (Leo Messi, Kylian Mbappé y Erling Haaland) pese a ganarlo todo siendo importante, con el punto culmen de ese gol en Estambul que transformó la final contra el Inter de Milán en la primera Champions en la historia de los 'Sky Blues'.

«Sinceramente no pienso mucho en estas cosas, no estoy pendiente», dijo el centrocampista español a EFE la campaña pasada después de la omisión en el «The Best».

En la misma línea fue Pep Guardiola la semana pasada cuando fue preguntado por el Balón de Oro, en un momento en el que todo el mundo veía como ganador a Vinícius Júnior. «No gasto ni un segundo en pensar en el Balón de Oro«, admitió el técnico, que ahora tendrá a sus órdenes a otro premiado por «France Football», como Leo Messi en su etapa en el Barcelona.

Además, Rodri es el quinto español en ganar este premio, tras Luis Suárez, Alfredo Di Stéfano, Aitana Bonmatí y Alexia Putellas, y el primer jugador del City en conseguirlo.

Si el City completó su repaso al fútbol con la conquista de la Champions en 2023, este galardón es una prueba más de su superioridad, porque ya no necesitan fichar Balones de Oro, ahora los producen, como demuestra que hayan transformado al Rodri que se fue del Atlético de Madrid en el mejor jugador del mundo.